Ha sido la revelación del fútbol de la pasada Eurocopa. Lamine Yamal, de tan solo 17 años, ha pasado de ser un canterano prometedor del F.C. Barcelona a convertirse en el ídolo de todo un país. De padre marroquí y madre guineana siente los colores de la Selección Española pero también ha hecho “patria” del humilde barrio que lo vio crecer: Rocafonda, en Mataró (Barcelona).

La población inmigrante convive con la española  

El futbolista rinde tributo a sus orígenes cada vez que marca un gol: lo celebra dibujando con los dedos la cifra 304, los tres últimos dígitos de su código postal. Rocafonda se presenta como un distrito caracterizado por su diversidad cultural: allí la población inmigrante es mayoritaria: especialmente con una gran presencia de familias de origen marroquí. Pero también hay población local, muchos de ellos de clase trabajadora y de procedencia extremeña y andaluza.

Yamal creció en un ambiente con recursos limitados, pero también en una comunidad muy unida, donde las familias colaboran entre sí. En Rocafonda el fracaso escolar está a la orden del día y el fútbol callejero sirve de refugio para muchos jóvenes. Yamal, sin embargo, lucha por destacar en ambos aspectos y en el mismo certamen que le consagró como futbolista profesional se graduó de la ESO.

Las calles de este barrio, repletas de calles estrechas, locutorios o panaderías como la del tío del futbolista, han forjado el carácter de la estrella que hoy visita a Pablo Motos en ‘El Hormiguero’. Sus habitantes defienden que a pesar de su naturaleza humilde no es un lugar peligroso y la mayoría de sus habitantes, con algunas excepciones demasiado sonoras, conviven en armonía.  De hecho, el padre de Lamine es habitual de un bar llamado ‘El Cordobés’.

Los habitantes de Rocafonda están muy orgullosos de su vecino más ilustre:  “Rocafonda es un barrio humilde. Con gente que busca salir adelante. Y el caso de Lamine Yamal es un mensaje positivo”, contaba hace unos meses a La Vanguardia Rocío Escandell, presidenta de la Asociación de Vecinos de Rocafonda quien señala que, aunque los índices de ocupación de vivienda forman parte del día a día del barrio, no lo definen.

La familia de la estrella: su abuela, sus padres y sus hermanos

Los orígenes de la estrella de ‘La Roja’ en este particular enclave tienen su origen en su abuela paterna, Fátima, que se marchó de su Tánger natal hace tres décadas para trabajar en nuestro país, concretamente en una residencia. Según contaba a la prensa un amigo de la familia, la mujer presume entre sus amistades de que ella lo llegó a España con todos sus papeles en regla.

Lamine Yamal con su abuela Fátima

Lamine quiere con locura a su abuela Fátima, afincada en España desde hace más de 30 años

Instagram de Mounir Nasraoui

Una vez instalada, Fátima -que ahora está jubilada y tiene 65 años- se trajo a España a sus cuatro hijos y a sus tres hijas: en su pisito, donde Lamine pasó su infancia, llegaron a vivir nueve personas.

El padre de Lamine ha protagonizado en los últimos meses titulares desagradables. Mounir Nasraoui, que en su propia cuenta de Instagram cuenta con más de medio millón seguidores, cuenta con un historial poco ejemplar: en 2023 atacó una carpa de Vox en Mataró y agredió a varios ocupantes. Este verano fue él quien fue víctima de un ataque cuando un vecino le intentó acuchillar, por suerte, sin éxito. Hasta que su hijo no ha empezado a ganar dinero, Mounir trabajado de forma esporádica tanto aquí en España como en Marruecos, país al que regresa con cierta frecuencia.

Lamine Yamal y su padre, Mounir Nasraoui

El padre del futbolista presume de las hazañas de su hijo

Instagram de Mounir Nasraoui

Cuando tenía tan solo 21 años Mounir conoció a la madre de Lamine: Sheila Ebana. En 2007, cuando ella tenía 16 y él 21, fueron padres de Lamine Yamal, pero la relación se rompió a los dos años y ambos progenitores tomaron caminos diferentes, aunque han tratado de mantener una buena relación por el bien de su vástago.

En la actualidad, tanto Mounir como Sheila han rehecho sus vidas con otras parejas. El padre del futbolista vive ahora con otra mujer con la que ha tenido descendencia: la pequeña Baraa. Sheila también ha rehecho su vida y tiene un hijo nacido en 2022 llamado Keine.

Tras divorciarse del padre de Lamine, Sheila pidió su traslado en el McDonald's de Mataró para poder estar en el de Granollers y apuntar a su hijo al C.F. La Torreta. A pesar de que su madre tiene mayor protagonismo tras el éxito de Yamal, al contrario que Mounir, ha optado por mantener un camino aislado de los medios y del foco mediático.

Lamine con su madre y su hermano pequeño

La madre de Lamine, Sheila, es la gran valedora de su éxito deportivo

Instagram de Sheila Ebana

En una entrevista reciente que Lamine Yamal hizo para la revista GQ reveló algunos objetos esenciales sin los cuales no puede vivir y, entre ellos, figuraba el plato preferido que le hace su madre antes de los partidos: arroz con pollo y salsa de cacahuete, “una comida típica de Guinea Ecuatorial”.

Una nueva vida en otra ubicación

Según se ha sabido este mismo fin de semana, Lamine y su familia han tomado la decisión de comenzar una nueva vida en Sant Joan Despí, cerca de la ciudad deportiva Joan Gamper, el lugar en el que el jugador español pasa la mayor parte de su tiempo. 

Lamine Yamal en el partido ante Francia

Lamine Yamal en el partido ante Francia.

Gtres

Hasta ahora Lamine hacía vida cotidiana en ‘La Masía’, la academia donde residen algunos canteranos del Barcelona. Cuando Lamine llegó a este centro, su vida cambió. Aunque Mataró y Barcelona están cerca en términos de distancia, el paso de una pequeña ciudad costera a la vibrante capital catalana fue un gran salto para un joven de su edad.

Gracias a su carácter humilde y su pasión por el fútbol el joven se adaptó rápidamente a este centro de alto rendimiento donde la disciplina es ley. Desde su llegada, Lamine no solo se destacó por su habilidad en el campo, sino también por su madurez y capacidad de aprendizaje.

Lamine Yamal es más que una joven promesa del fútbol. Su historia, desde sus humildes comienzos hasta su ascenso en el FC Barcelona, es un testimonio de la importancia del esfuerzo en el desarrollo de una persona. Su éxito representa el fruto de su talento y el trabajo duro, pero también el de una comunidad que lo apoyó desde sus primeros pasos en el fútbol.