Ha sido un vuelo largo, pero Isabel Pantoja ya está en Miami, donde este próximo 10 y 11 de febrero ofrecerá su primer concierto, con el que dará el pistoletazo de salida a su gira americana. El revuelo mediático que ha provocado en nuestro país su salida de Cantora para volver al trabajo ha traspasado fronteras y en Miami su llegada ha sido triunfal. Consciente de ello ha sido la propia Isabel, que salía del aeropuerto con la misma ropa que llevaba cuando salía de Madrid. No olvidaba sus características gafas de sol, las mismas que se colocó para ocultar sus ojos, a pesar de que en Miami ya era de noche a su llegada.

La tonadillera no se podía imaginar el revuelo que ha causado su viaje a Miami. De hecho, acompañada de su hermano, Agustín Pantoja, salía de la terminal tras su aterrizaje. No dudó en colocarse la mascarilla para que la prensa no captara su rostro tras nueve horas y media de vuelo. Porque no ha podido evitar encontrarse con la prensa, que ha querido captar las primeras imágenes de la cantante en Estados Unidos. Y no podemos pasar por alto la puesta en escena con la que se encontró. Guardaespaldas fuertes intentaron en todo momento proteger a Isabel Pantoja, a la que se le acercaron algunos fans. Uno de ellos, de hecho, trató de entregarle un amuleto de la suerte.

El personal de seguridad brinda por la seguridad de Isabel Pantoja

Guardaespaldas, fans y mucha prensa: así ha sido la llegada triunfal de Isabel Pantoja a Miami
Gtres.

Fue su sobrina, Anabel Pantoja la encargada de compartir el momento salida del aeropuerto de su tía. Y es que no daba crédito al ver al personal de seguridad que se ha contratado para la cantante: "Estamos esperando que salga mi tía y claro, ha venido la seguridad y mirad el tamaño de las personas. Mirad su tamaño. Ósea me dan miedo. Este hombre es una columna", ha declarado sorprendida la 'influencer'.

Después de su llegada triunfal, Isabel Pantoja y todo su equipo se desplazaba hasta el hotel en el que se van a alojar estos días. Mientras Isabel Pantoja lo hace desde la más estricta intimidad, vamos a conocer cómo va a ser el día a día de la tonadillera gracias a Anabel Pantoja, que está mostrando (y lo seguirá haciendo) todos los momentos que está viviendo al otro lado del charco. Al aterrizar, un minibús esperaba a todo el equipo para trasladarlos a todos al hotel. Bien cargados de maletas, procedieron a hacer el check-in. Anabel no dudó enseñar la habitación de su hotel y las vistas. Ella misma no podía reprimir las lágrimas al pensar en la experiencia que está viviendo.