La justicia confirmó en 2013 que Carlos Baute es su padre, pero aún así no recibió ni su ayuda ni su cariño. Nunca ha tenido a su padre junto a él, pero su dura situación económica le ha obligado a pedir su auxilio, al menos hasta que recupere las riendas de su vida. El cantante se niega
Carlos Baute tomó una firme decisión de no mantener contacto alguno con José Daniel Baute, el joven que durante toda su vida ha luchado por ser reconocido legalmente como hijo legítimo por parte del cantante. La justicia ya se ha pronunciado sobre su caso en 2013, confirmando el parentesco biológico entre padre e hijo, lo que no influye en el deseo de Carlos Baute de mantenerse al margen de la vida de este joven, para así centrarse en el exclusiva en su otra vida y los hijos que ha tenido justo a su esposa, Astrid Klisans. Sin embargo, no puede escapar de su pasado.
Este viernes termina el plazo de 10 días establecidos por la Justicia para que Carlos Baute pudiese pronunciarse sobre la demanda de amparo y ayuda alimenticia que su hijo, José Daniel Baute, interpuso contra él. El joven vive en Baeza, Jaén y, a pesar de tener ya 29 años, ha pedido judicialmente que el cantante se haga cargo de su manutención, pidiéndole una pensión de 1.400 euros. Asegura no tener medios para sobrevivir por su cuenta y alega, además, que está solo, dado que su madre, Nallera Zerimar Arellán Castillo, vive en Venezuela y no tiene la posibilidad de prestar auxilio a su hijo.Así, el hijo biológico de Carlos Baute ha tratado de buscar la compasión de su padre, grabando un vídeo en el que expone su delicada situación económica: “No quiero una pensión para toda la vida. Solo mientras dure mi situación y mis problemas económicos”, confiesa. Al menos no está solo en su lucha, porque el abogado Fernando Osuna trata de velar por él para que su caso no decaiga: “Se produce un claro abuso de derecho respecto del progenitor demandado que, siendo conocedor de que tiene un hijo declarado mediante sentencia desde el año 2013, no ha querido atenderlo en ningún momento, ni afectuosamente, ni ha querido tampoco conocer y hacerse cargo de sus posibles necesidades vitales”. Vea el vídeo para conocer mejor su dramática historia.