No ha sido este un año fácil para Eva Ruiz, la reina de las tardes en Andalucía. La audiencia la apoya y ha cumplido 14 años siendo la copresentadora, junto a Juan y Medio, del programa líder del canal autonómico andaluz La tarde, aquí y ahora. Eva y Juan forman un tándem perfecto que ha conseguido formar parte de las familias andaluzas y que ha ayudado a encontrar el amor a muchas parejas. Recientemente, Eva tuvo que tomarse un descanso obligado debido a una operación que le llevó a estar durante un mes de baja. En sus primeros días de descanso, antes de enfrentarse a un verano televisivo muy competitivo, nos cuenta en exclusiva cómo ha vivido este año complicado mientras la acompañamos a un paseo por el río Guadalquivir.
¿Pasarás el verano trabajando?
Estoy feliz. Voy a estar todo el verano en las tardes de Andalucía, junto a Pepe Da Rosa.
Este año te has enfrentado a un problema de salud que has hecho público.
Sí, porque creo que debía esa explicación a la gente que cada día me ve y demuestra su cariño. Antes de hablar yo, me empezaron a llegar rumores, se habló incluso de cáncer y me parecía deshonesto permanecer callada. Además, hay muchas mujeres que han pasado por esto y no tiene que causar miedo hablar sobre el hecho de haberte sometido a una intervención para que te quiten el útero. Tras pasar por ello, sigues siendo igual de mujer que antes y no pasa nada.
¿Sorprendida de la respuesta de la gente?
Sí, he recibido mucho cariño y eso me ha dado mucha fuerza. Verme de repente un mes sin trabajar me hacía sentirme mal, además la operación se complicó. El útero estaba en una situación complicada y mi ginecóloga, Inmaculada Sáez, me dijo que había que intervenir rápidamente y entré en el quirófano un Miércoles Santo. Después hubo un problema de sangrado y estuve un día y medio en la UCI. En la recuperación tuve otro inconveniente, se abrió la herida del drenaje y estuve unos días en tratamiento.
¿Has pasado miedo?
Miedo no, pero antes de entrar en quirófano quise dejar todo arreglado. Siempre me he considerado muy responsable.
Y has vuelto revitalizada.
Ahora me siento más fuerte que nunca.
Hacer un programa diario 14 años produce desgaste...
Aunque los problemas te merman las fuerzas, tengo un gran aliado en esta aventura que es Juan y Medio y nos damos energía mutuamente.
En estos años, también Juan ha pasado por problemas de salud importantes.
Sí, se le rompió el fémur y fue una rotura complicada que le hizo estar mucho tiempo en recuperación. Cuando le dijeron que podía sentarse, lo hizo para presentar el programa, aunque fuera en una silla de ruedas.
Trabajar al lado de alguien como Juan, rápido e imprevisible, debe ser complicado.
Yo soy muy organizada, pero he aprendido mucho a su lado, porque me ha enseñado a estar preparada para los cambios. Con él hago un máster diario.
¿Y tú crees que le has enseñado algo a él?
Hombre, algo le habré enseñado digo yo (risas). A mí me dice que me necesita enfrente para hacer el programa, porque es importante tener a alguien en quien confíes.
¿Ves a Juan y Medio buscando pareja en el programa?
No lo necesita, aunque cree ciegamente en la labor del programa. El espacio está enfocado a las personas que no tienen recursos para conocer a gente y Juan tiene muchos.
¿Y tú has pensado en sentarte en el sillón del programa?
De momento, no me hace falta (risas).
¿Te sobran candidatos?
Nunca sobran (risas). Me parece un recurso estupendo venir al programa. Si no tuviera forma de conocer a la gente, lo haría. Lo que no creo que hiciera nunca es recurrir a las redes sin saber con quién hablas.
¿Y en qué momento sentimental estás?
Sabiendo lo que quiero. Tengo clarísimo que estoy en un momento de madurez, sé lo que quiero y, más aún, lo que no quiero y quizás eso me haga ser demasiado selectiva.
Las tardes televisivas van a ser muy competitivas en septiembre con la llegada de Ana Rosa Quintana. ¿Tienes miedo?
Francamente, no, Ana Rosa tendrá su público y caras conocidas, pero nosotros tenemos un público muy fiel y procuraremos no defraudarles.