Esther Doña ha posado en un barco que surca el Mediterráneo y ha presumido de quién es su fotógrafo: Santiago Pedraz, el juez con el que está ilusionada.
Esther Doña perdió en el mes de marzo del pasado año al amor de su vida, pero tras la tormenta ha llegado la calma para ella. Después de un duelo muy complicado y de no haberse despedido de Carlos Falcó como ella hubiera deseado, la marquesa ha rehecho su vida. Junto a Santiago Pedraz, juez de la Audiencia Nacional, ha vuelto a creer en el amor. Aunque su historia comenzó como una bonita amistad, esta ha evolucionado hasta tal punto que ambos se encuentran muy ilusionados. Así lo refleja el último post publicado por la malagueña donde además de escribir una romántica reflexión, asegura que quien se encuentra tras la cámara es este reputado jurista. "Sigo perdida por aguas del Mediterráneo … y vosotros ¿dónde estáis? Ojalá nunca termine, está permitido soñar", escribe Esther Doña junto a un escueto álbum en el que ella aparece enfundada en un sexy traje de baño.
La que fuera esposa de Carlos Falcó continúa de vacaciones y en esta ocasión se ha decantado por surcar los mares junto a su pareja. Hace menos de una semana comenzó a compartir algunas imágenes de ambos desde la embarcación y, aunque no ha dado demasiados detalles acerca de este periplo, de lo que nadie duda es de que está feliz. Su vida ha dado un giro de 180 grados en los últimos meses, de hecho poco tiene que ver con el día a día al que hacía frente hace algún tiempo. Santiago tiene un gran peso en este giro vital y lo demuestra que ella ya ni siquiera esconda el especial vínculo que les ha unido. Ya han sido vistos muy cómplices y no es para menos, pues han iniciado un romance del que están orgullosos. Se comentan públicamente y así se puede leer en la red social de Instagram, donde él le escribe "más te encuentro" y ella responde con emojis ruborizados y corazones.
Ambos se entienden a la perfección y han optado por pasar sus días de asueto juntos para exprimir al máximo su verano. Ella no duda en posar para él y Santiago Pedraz incluso ejerce de fotógrafo, arte que, por cierto, no se le da nada mal si analizamos las últimas instantáneas que ha publicado Esther Doña. La maniquí ha pasado página y, aunque siempre tendrá un profundo cariño al que fue su gran amor, ella prefiere seguir adelante. Su última etapa ha sido durísima, pero Santiago Pedraz ha supuesto para ella un soplo de aire fresco que poco a poco le ayuda a volver a sonreír. A pesar de que se muestran cautos y no están dando muchos detalles sobre su relación públicamente, la sonrisa les delata. Han sido vistos besándose en plena calle y esto solo revela que no tienen miedo al qué dirán, ya que están seguros de lo que sienten el uno por el otro.