Silvia Bronchalo (49 años) está viviendo sus meses más complicados. Y es que está siguiendo desde Tailandia todas las sesiones del juicio contra su hijo, Daniel Sancho, acusado de matar y descuartizar a Edwin Arrieta el pasado mes de agosto. Aunque el primer día del juicio, que se celebró el pasado 9 de abril, no pudo estar por encontrarse mal, desde la segunda sesión, no se ha perdido ninguna. Silvia está sola -su relación con Rodolfo Sancho es nula-, pero no duda en estar al lado de su hijo en estos momentos tan difíciles para él.
Silvia Bronchalo luce una camiseta con un mensaje de lo más llamativo
Este miércoles ha comenzado una nueva sesión del juicio, que se extenderá hasta el próximo 3 de mayo. Silvia Bronchalo ha llegado a la corte con rostro serio y con un look de lo más informal, dejando claro, una vez más, que prefiere mantener un perfil bajo. Pero hay un detalle que nos ha impactado. Y es que ha lucido una camiseta en color mensaje con un mensaje de lo más llamativo: 100% Vallekan@.
A pesar de que siempre se ha decantado por mantenerse en un discreto segundo plano, Silvia da que hablar por culpa de esta prenda que ha lucido durante este miércoles a su llegada a la corte de Tailandia. Aunque siempre opta por looks nada llamativos, esta camiseta ha impactado. ¿Qué mensaje quiere mandar Silvia Bronchalo al resto del mundo?
Silvia Bronchalo está instalada estas semanas en Tailandia, pero lo cierto es que tiene una vida de lo más tranquila en Madrid. Pero parece que no olvida sus orígenes. Esta prenda de ropa que ha lucido este miércoles la delata, en la que deja claro que es de Vallecas, un municipio muy conocido de la capital española. Las personas que viven en este entorno son unos enamorados de su zona, por lo que han fabricado esta camiseta en la que muestran con orgullo de dónde son. Esta camiseta que luce Silvia Bronchalo se puede adquirir en Internet a un precio de 14 euros.
La vida de Silvia ha dado un cambio de lo más radical
La vida de Silvia Bronchalo ha dado un giro de 180 grados. Aunque con tan solo 19 años se convirtió en madre de Daniel Sancho, fruto de su relación con Rodolfo Sancho, uno de los actores más conocidos de nuestro país, esta siempre ha preferido mantenerse en un discreto segundo plano. Sin embargo, el supuesto asesinato cometido por su hijo le ha llevado a dejar su vida en Madrid, donde trabajaba en una gestora de patrimonios, para instalarse en Tailandia y acudir a todas las sesiones del juicio contra Daniel Sancho.
Para ella era fundamental estar al lado de su hijo en estos momentos tan complicados para ella. Aunque esté sola. De hecho, los días en el país extranjero se hacen muy largos. Las sesiones del juicio no ocupan su día al completo. Esto le lleva a salir de su alojamiento con frecuencia para disfrutar de ratos de desconexión en medio de una tormenta de lo más polémica.
Dedica los ratos libres a pasear y a pedir por su hijo
Durante los ratos libres o cuando no tiene sesión del juicio, Silvia Bronchalo da paseos y visita algunos de los templos que hay allí. Unas imágenes que publica Diez Minutos muestran a una Silvia tranquila mientras acude al templo del Gran Buda, situado en uno de Bang Rak, donde pidió por el futuro de su hijo. No dudó en hacer una ofrenda por él ahora que se enfrenta a una pena de cárcel.
Para Silvia no está siendo fácil, pero ella ha preferido mantenerse en silencio. Sin embargo, llegan detalles sobre cómo está viviendo estos meses: "Viene arrastrando una serie de cuestiones... No está pasando un buen momento. Ella es madre y ya le ha visto encadenado... Al final, a una madre nos tiran los hijos...", explicó la abogada de la expareja de Rodolfo Sancho, Carolina Castro. Estas palabras no hacen más que dejar claro el estado anímico que arrastra Silvia en estos momentos, en los que se encuentra sola y sin apoyos en Tailandia.
Rodolfo Sancho, con el que Silvia no tiene buena relación, ha tenido una forma diferente de enfrentarse a este problema. Y es que no dudaba en hablar en un documental, 'El Caso Sancho', en HBO Max, donde explicaba cómo se tomó la noticia del asesinato de Edwin Arrieta y las posteriores etapas del proceso judicial en el que se vio inmerso su hijo tras ser acusado de la muerte del cirujano colombiano.