Rafael Amargo fue ingresado ayer en prisión provisional sin fianza por 'riesgo de fuga', una medida que se ha producido por sorpresa. Esta decisión ha sido tomada por la Audiencia de Madrid ante la apertura de un proceso judicial que le podría conllevar una pena de hasta nueve años de prisión por un delito de tráfico de drogas. La justicia ha dictaminado su ingreso en el centro penitenciario de Soto del Real hasta la fecha del juicio, previsto para abril del próximo año. El motivo que ha impulsado esta medida cautelar es la asistencia irregular a las citas que el bailaor tenía programadas para firmar en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes.
Una relación entre padre e hijo llena de altibajos
Una situación preocupante, sin duda, la que está viviendo Amargo, pero que ahora se agrava con la reciente información que ha salido a la luz sobre la precaria salud de Florentino, su padre. El hombre ha tenido que ser hospitalizado y su situación es delicada. Amargo ya ha expresado, en más de una ocasión, el dolor que le produce el impacto emocional que estaban provocando a Florentino los problemas que él tenía con la justicia. Al parecer, su estado es muy delicado, una condición que, sin duda, va a hacer todavía más mella en el estado anímico del artista.
La relación de Rafael Amargo con su padre Florentino siempre ha sido compleja y ha estado marcada por numerosos altibajos. Hace tres años, la revista SEMANA revelaba numerosos detalles a través de una entrevista que concedió en exclusiva una persona muy cercana al bailaor. Según dicho testimonio, Rafael evitaba el contacto con su padre debido a su franqueza y lo claro que le hablaba sobre lo que le disgustaba de su vida personal.
Se ha presentado un recurso de súplica
Florentino fue crítico con su hijo, especialmente cuando se hicieron públicos los escándalos que le llevaron a ser arrestado por la policía. Ya se decía, hace tres años, que no había comunicación entre ellos. Sin embargo, el estreno de la obra 'Yerma', en el Teatro La Latina, a principios de 2021, parecía que marcaba un punto de inflexión. Los padres de Rafael Amargo subieron al escenario para celebrar junto con su hijo su cumpleaños y soplar las velas. Para el bailaor, aquello significaba que habían hecho las paces y se sentía muy feliz.
Rafael Amargo ha descrito a sus padres como personas sumamente íntegras. Entre su círculo más cercano se cuenta también a su esposa, Luciana, quien, hace dos años, fue detenida por presunta pertenencia a una organización criminal. Actualmente, la esperanza reside en que la corte considere los argumentos que Jaime Caballero, el letrado defensor de Amargo, ha articulado en el recurso de súplica, con el objetivo de lograr la liberación del bailaor de las rejas de Soto del Real.