La sobrina de Isabel Pantoja ha madrugado para practicar su deporte favorito, paddle surf.
Anabel Pantoja lleva casi dos meses de estricto confinamiento en su casa de Pozo Izquierdo, Canarias, donde está guardando la cuarentena junto a su prometido, Omar Sánchez. La sobrina de Isabel Pantoja se ha convertido en una de las revelaciones de la cuarentena donde a golpe de 'click' ha relatado parte de su día a día. Esta vez ha salido de su hogar para disfrutar de una de sus grandes aficiones, el paddle surf.
A través de su perfil en redes, ha compartido cómo se ha desarrollado esta salida. Ha madrugado para estar a primera hora de la mañana de este sábado en la playa de Pozo Izquierdo. Antes de las nueve ya estaba disfrutando de los primeros rayos de sol y dispuesta a lanzarse al agua tabla y remo en mano. La polémica ha surgido cuando algunos de sus seguidores han comentado que no cumplía con las norma establecidas por el estado de alarma en el que se encuentra sumido el país.Una controversia que ella misma se ha apresurado a aclarar también en redes. Visiblemente molesta y en actitud muy seria indicaba lo siguiente: "Para todas esas personas que opinan sobre las normas. Puedo hacer deporte de 6 de la mañana a 10 (hora canaria). Unos pueden correr, otros pueden montar en bici y yo hago PADDEL SURF".
Su 'sex-appeal'
Las críticas no han podido arruinar un magnífico día disfrutando del deporte al aire libre. La colaboradora de 'Sálvame' ha compartido fotos, vídeos y momentos de esta jornada deportiva donde ha demostrado toda su destreza sobre un mar muy calmado. Con un biquini azul, se mostraba muy agradecida de haber comenzado el día madrugando y así ver un paisaje inusual, una playa casi vacía: "No valoramos lo que tenemos hasta que nos lo quitan", reconocía. De regreso a casa, nada mejor que una reconfortante ducha en el patio de la casa. Anabel no dudaba en inmortalizar también este momento y mostrar todo su 'sex-appeal', como ella misma ha indicado.
Anabel ha sacado su lado más positivo durante esta cuarentena en la que ha aprovechado para ponerse en forma con sus hilarantes sesiones de fitness que cuentan con una legión de fans. También se ha convertido en una importante 'influencer' rebasando el millón de seguidores en Instagram. Su pareja, Omar, es su mejor aliado, además de vivir el confinamiento con él, también ha participado en muchas de las publicaciones de Anabel. La pareja que tenía previsto pasar por el altar el próximo mes de junio ha tenido que posponer sus planes por la crisis sanitaria.