Kiko Rivera revolucionaba la crónica social esta semana y sorprendía a la audiencia cuando confesaba en directo sus adicciones a las drogas al hacer ‘la curva de la vida’ para el programa donde está concursando, ‘GH DÚO’. El Dj quiso sincerarse por fin y reveló una información que llevaba callando mucho tiempo y que le pesaba como una losa. Desde que decidió ponerse en manos de profesionales y cambiar de hábitos, Kiko es otro y ha logrado ser una persona feliz gracias a su esfuerzo y el apoyo incondicional de las dos mujeres de su vida: Irene Rosales e Isabel Pantoja.
"Querer es poder"
Desde hace un año y medio Kiko no ha vuelto a probar las drogas y ha salido del hoyo en el que se encontraba. Ahora ha querido dar un mensaje de esperanza a la gente: de las drogas se sale si uno quiere hacerlo.
Un padre ejemplar
El hijo de la tonadillera ha conseguido ser el padre que Irene quería para sus hijas, un hombre sano que ha roto con sus adicciones y está centrado en su familia.
El apoyo incondicional de los suyos
“Seguramente mi madre hoy se sentirá orgullosa, gracias a ella y a mi mujer soy una persona nueva y una persona feliz, y se lo agradeceré a las dos eternamente hasta el día en que me muera”, confesaba el hijo de Isabel Pantoja.
El orgullo de una madre
No andaba desencaminado, su madre, según ha contado su prima, Anabel Pantoja, al ver a su hijo relatar todo en directo dijo: “Olé sus testículos. Ese es mi niño”.
Mucho más centrado en su profesión
Además, tras la pausa que Kiko hizo en su carrera musical, el Dj ha retomado su trabajo en las mejores condiciones, puesto que como él mismo aseguraba, antes no rendía al 100% debido a que consideraba trabajar como irse de fiesta.
Ha madurado tras el proceso de desintoxicación
Kiko es una persona que ahora controla mucho mejor sus emociones: “Mi vida ha cambiado. Ahora estoy súper tranquilo, puedo hablar sin alterarme”.
Un nuevo Kiko Rivera
Todas sus adicciones han quedado atrás y, aunque actualmente continúa con su tratamiento y se somete a controles que demuestran que está limpio, Kiko es hoy una persona totalmente recuperada.
Relación de pareja fortalecida
Pasar por un trance tan duro ha unido a Kiko y a Irene, que ha sido un pilar fundamental en la recuperación del Dj. Irene admitía en el programa: “Pasaría mil veces más ese momento por verlo como está ahora”.
Padre responsable y de familia numerosa
Kiko por fin puede disfrutar plenamente de su familia, especialmente de sus tres hijos, Francisco, fruto de su relación con Jessica Bueno, y Ana y Carlota, de su matrimonio con Irene.
La sorprendente revelación
Él mismo explicaba en el programa del martes, ‘Límite 48 horas’, que su depresión se había debido no sólo a la pérdida de 50 kilos de peso, como habían dicho en un primer momento, sino que había sufrido una grave adicción al hachís, la marihuana y la cocaína.
Irene fue quien tomó las riendas de su recuperación
Una sincera confesión en la que el hijo de Isabel Pantoja se abrió en canal para comentar que un día su mujer se puso firme y dijo basta. Lo que el amor no consiga...
Lo más duro fue contárselo a Isabel Pantoja
Irene se emocionaba al recordar cómo había intentado todo y había fracasado hasta que le hizo contar a Kiko sus problemas frente a su madre.
Irene e Isabel, los dos pilares de la vida de Kiko
Juntas, Irene e Isabel consiguieron que Kiko cambiara de vida y se centrase en superar su adicción con ayuda de profesionales, sometiéndose a un tratamiento muy duro.
Kiko compartió con sus compañeros su adicción
Una etapa muy difícil en la que Kiko ha confesado que sufrió “temblores y sudores fríos” y unos radicales cambios de humor, pero que con tesón, constancia y esfuerzo le han llevado donde está hoy. El resto de concursantes le arroparon.
Chantajeado por su mala vida
Atrás quedan las noches de desfase y los malos hábitos que le suponían no sólo un riesgo para su salud, sino también una importante fuente de problemas, como los chantajes que reconocía este jueves en la gala de 'GH Dúo' a los que durante años le han sometido.