Maite Galdeano se encontraba muy mal y acudió a urgencias, donde le han hecho pruebas para determinar qué le sucede. Lo que le ha sucedido podría ser consecuencia de su cáncer
Maite Galdeano se sentó de nuevo en su preciada silla en ‘Viernes Deluxe’ para tener un cara a cara con su consuegra, la madre de Kiko Jiménez. Fue una noche muy intensa llena de emociones desbordantes, pero la exconductora de autobuses siempre se siente en su salsa en el conflicto y frente a las cámaras se crece y saca a relucir todo su carisma que le han convertido en uno de los personajes más variopintos de la cadena. Pero una vez terminada su colaboración en el programa de Jorge Javier Vázquez, la madre de Sofía Suescun comenzó a encontrarse mal, con fuertes dolores en el pecho y vómitos, lo que finalmente terminó llevándola al hospital al precisar ayuda profesional y es que su salud es especialmente frágil por el hecho de llevar años batallando contra el cáncer.
Fue su hija la que desveló que Maite Galdeano padece cáncer en la sangre, aunque sobrelleva bien la enfermedad y por eso había preferido mantenerlo oculto estos últimos años. Aun así, al confesar en sus redes sociales su malestar, fueron muchos los seguidores que le recomendaron hacer parada en el hospital para que le ofreciesen un diagnóstico concreto de lo que le estaba provocando estos dolores y vómitos. Finalmente cedió y acudió a urgencias, aunque ella mantenía en todo momento que lo que le sucedía era meramente un dolor muscular, algo que respaldaba en un primer momento su hija, que retransmitió en vivo y en directo su paso por el hospital: “Ella cree que es muscular, yo también lo creo. Las contracturas en esa zona son mortales, con calor y algún relajante se le irá quitando”.Pero el diagnóstico de los médicos, tras someterse a diversas pruebas, ha dejado claro que no se trataba de un mero dolor muscular como madre e hija creían en un primer momento. Fue la propia Maite Galdeano de ofrecer el veredicto final a sus seguidores una vez que regresó a casa tras eternas horas en el hospital con una vía intravenosa en la que se le administraba medicamentos para mitigar el dolor. “Estoy muy contenta de haber salido de esta, porque la cabeza, que es lo más importante, empieza a darle vueltas al asunto. Sé lo mala y enferma que estoy”, decía Maite Galdeano, que fue respaldada por su hija: “Para que mi madre vaya a urgencias es que está muy mal”, reconocía.
Maite Galdeano reconoce estar “flojita y sin fuerzas”, pero al menos sí encontró el ánimo suficiente para explicar a sus fans el diagnóstico que le han ofrecido los médicos: “Sí que es verdad que, por lo que tengo en la sangre, salió todo muy descompensado. Me dijeron que en dos semanitas lo más seguro es que haya que quitar otro medio litro de sangre, pero bueno, estoy acostumbrada. No saben si es propio de las enfermedades que yo tengo. Sobre todo, la más maldita, la de la sangre, que es un cáncer de sangre. Así, con todas las palabras. O un virus de gastroenteritis bastante virulento. En eso se ha quedado el tema. Pero bueno, paciencia. Por lo menos hoy no vomito y estoy estabilizada”, trataba de tranquilizar la de Pamplona a sus fans, aunque su diagnóstico parece no haber solucionado sus dudas.