Centrada en su faceta como modelo, que la ha llevado hasta una de las ciudades más importantes en lo que se refiere a moda, París, Lucía Rivera ha visto cómo su nombre se ha vuelto a convertir en noticia. Aunque muchos se han alegrado al saber que está saliendo con el piloto Marc Márquez, otros tantos han aprovechado para criticarla.
No se ha quedado callada
Lucía es muy activa en las redes sociales y es ahí precisamente donde ha contestado a todos los haters que, lejos de alegrarse porque esté viviendo un momento feliz, la han atacado.
Intenta hacer caso omiso
El mensaje que ha compartido Lucía en Instagram comienza explicando que intenta no leer los comentarios que la gente hace de ella, pero en ocasiones no puede evitarlo.
Cansada de que se hable de su vida
“No entiendo por qué tanta inquina y tanto odio hacia mí simplemente por ser adoptada por mi padre”, comienza diciendo.
Sin poder de decisión
La adopción por parte del torero Cayetano Rivera es un tema que suele surgir cada cierto tiempo y está cansada. Ni ella tuvo poder de decisión en ese asunto ni a él “nadie le ha obligado a hacerlo”, asegura.
Un zasca a los que la critican
“Recordad que somos un espejo y que vemos en el otro lo que somos nosotros mismos”, dice a modo de consejo para que dejen de hablar mal de ella.
A su familia le hace daño
“Tengo familia, tengo amigos… Y no creo que a ninguno de vosotros os gustaría leer comentarios de este tipo hablando así de vuestros seres queridos y más escritos desde la ignorancia”.
Valores desde pequeña
La hija de Blanca Romero sabe que no ha hecho nada malo y, por eso, pide que se dejen de hacer comentarios negativos que hacen daño a los que más la quieren.
A nadie le gusta que le critiquen
“Si algo me han enseñado en casa es a no pisar a nadie, y menos sin motivos y sin tener ni idea ni haberme puesto sus zapatos”.
Cada cual sabe lo que ha hecho
“Cada uno tenemos nuestra mochila y nadie es más que nadie. Vamos, creo que es la base de la educación”.
El anonimato de las redes sociales
Otra de las grandes críticas va dirigida a quienes la critican sin dar la cara. “A razón de existir las redes sociales hay mucho ‘valiente’ detrás de la pantalla”.
Pide un poco de respeto
Aunque es muy madura para su edad y sabe lo que quiere, Lucía no deja de tener 20 años “y sentimientos al igual que todos”.
¿Enchufada?
Otra de las críticas que más la molestan son aquellas que aseguran que ha llegado a donde está gracias a los apellidos de sus padres. Algo que niega rotundamente.
Podría haber tenido una vida más fácil
“Si hubiera querido vivir del cuento hubiera tomado caminos mucho más fáciles a los que he tomado”.
No se arrepiente
Y, aunque podría haber sido más sencillo, no lo cambia por nada. “Simplemente me dedico y me desvivo por lo que me gusta”, asegura.
Termina con un ejercicio de autorreflexión
“Cada uno que se mire por dentro antes de hablar de alguien que no hizo ni está haciendo nada malo”.
Y un piropo a su madre
“Y por cierto, tengo una madre maravillosa y auténtica”, sentencia.