La famosa "influencer" y youtuber estadounidense, Ruby Franke, conocida por su canal "8 Passengers" con más de 2,3 millones de suscriptores, se enfrenta a graves acusaciones tras ser arrestada por supuestos "abusos y malnutrición infantil". La detención se llevó a cabo después de que se descubriera a dos menores con signos de malnutrición y con marcas, que parecen indicar, que habían sido amordazados.
Ruby Franke con su familia es una influencer con más de 2,3 millones de seguidores. (@moms_of_truth)
Un menor hospitalizado de gravedad
Todo comenzó cuando un vecino de Santa Clara, Utah, se encontró con un niño demacrado y en estado visible de desnutrición, con heridas provocadas por "cinta adhesiva" en sus piernas y brazos. Según el Departamento de Seguridad Pública de Santa Clara, el menor fue llevado de urgencia a un hospital cercano debido a la gravedad de su estado. Las autoridades, tras atender a este niño, fueron alertadas sobre otro menor en circunstancias similares en una vivienda cercana, probablemente la de Jodi Hildenbrandt, socia de Franke, quien también ha sido arrestada bajo las mismas acusaciones que Ruby Franke.
De hecho, es en la casa de Hildenbrandt donde los oficiales hallaron al segundo niño. Posteriormente, otros cuatro menores fueron puestos bajo la custodia del Departamento para Niños y Familias del estado. La notoriedad de Franke y Hildenbrandt no se limita a YouTube. A través de su cuenta de Instagram "Moms of Truth", promovían una educación y crianza muy severas y fundamentadas en la fe cristiana, logrando captar la atención de más de 343,000 seguidores. Además, ambas colaboran ConneXions, una empresa de Hildebrandt orientada a ofrecer consejos sobre relaciones afectivas en el ámbito familiar.
Jodi Hildenbrand y Ruby Franke comparten el canal "moms_of_truth". (@moms_of_truth)
La hija mayor de Ruby se marchó de casa
Pero la controversia no ha quedado ahí. Kevin Franke, marido de Ruby, ya se ha pronunciado sobre este tema y no precisamente para calmar las aguas, más bien todo lo contrario. De hecho, ya había sido objeto de denuncias previas ante los servicios de protección infantil. Las acciones disciplinarias extremas de la youtuber Ruby Franke ya habían generado preocupación entre sus seguidores tiempo atrás. Casos como el de su hijo durmiendo en un puff durante siete meses como castigo, o un episodio en el que otro de sus hijos se quedó sin comer por no haber preparado su almuerzo, provocaron polémica entre sus seguidores.
La hija mayor de Ruby, de 20 años, se ha desvinculado de su familia. Recientemente expresó su alivio porque "la justicia actuase", revelando que lleva años tratando de alertar a las autoridades. Además, las hermanas de Franke, mediante sus propias cuentas de Instagram, reafirmaron que el arresto era necesario para el bienestar de los niños: "Hemos hecho todo lo posible para garantizar la seguridad de los niños".