Daniel Sancho, hijo de Rodolfo Sancho, se enfrentaría a una pena de muerte en Tailandia

El hijo de Rodolfo Sancho, Daniel Sancho Bronchalo, ha sido acusado de un presunto asesinato ocurrido en Tailandia. La víctima es Edwin Arrieta Arteaga, un cirujano plástico, de 44 años, quien llegó al país asiático el pasado 31 de julio. Fue el hijo del intérprete quien denunció su desaparición unos días después. Su cuerpo descuartizado ha sido hallado en distintas bolsas de basura en un vertedero de la isla turística Koh Pha Ngan.

Tailandia posee una de las legislaciones más duras del mundo, su código penal considera el homicidio uno de los delitos más graves. El artículo 288 apunta a que un asesinato puede ser condenado a la pena de muerte, a cadena perpetua o a prisión por un periodo de tiempo que oscila entre 15 y 20 años. Aunque la ley lo permite, las ejecuciones son raras en el país. Muchas de las sentencias son conmutadas, aunque depende de la gravedad del caso. Hace unos años fuimos testigos de un mediático caso del español Artur Segarra quien fue condenado por el asesinato en 2016 del empresario David Bernat en Bangkok a pena de muerte. Sin embargo el rey de Tailandia, Maha Vajiralongkorn, conmutó la pena con motivo de su 68 cumpleaños. Lo hizo después de que el reo pidiera clemencia por carta. Se le impuso la cadena perpetua y se abrió la posibilidad de que se iniciara el traslado a una cárcel española. Para ello debe haber cumplido un total de ocho años en prisión en Tailandia.

Conmoción por el caso

Los medios tailandeses han publicado que fue el propio Daniel Sancho quien denunció la desaparición del médico y que presentaba arañazos en sus brazos. Las autoridades también han indicado que ambos se conocían y se reencontraron en la isla donde el cirujano tenía una reserva de hotel del 31 de julio al 3 de agosto. El Bangkok Post detalla que Daniel Sancho negó en un primer momento que estuviese involucrado con el asesinato, pero tras el interrogatorio se derrumbó: "Lo admitió".

La muerte de Edwin Arrieta Arteaga ha provocado una fuerte conmoción en su país, Colombia. La familia ha emitido un comunicado en el que afirma que no realizará declaraciones para no entorpecer la investigación. "Agradecemos respeto por este difícil momento que estamos viviendo", subrayaba la nota. Mientras que el padre del principal sospechoso, Rodolfo Sancho, ha viajado a Tailandia para estar al lado de su hijo. Por el momento ni la embajada española en Bangkok, ni Rodolfo Sancho, ni su representante se han pronunciado sobre el crimen.