El pasado 5 de marzo, Belén Esteban cumplía uno de los objetivos que lleva mucho tiempo persiguiendo en los juzgados: tomaba posesión de la casa de Toño Sanchís. Se trata del chalet familiar de su exrepresentante, que la colaboradora adquirió en subasta pública en abril de 2019. Gracias al desahucio de la vivienda, la 'Princesa del pueblo' podrá hacer frente a las deudas contraídas por las irregularidades en la gestión de su mánager.
Vecinos del exmánager aseguran que hizo la mudanza la semana pasada
La mañana que se produjo el desahucio, Belén se encontró con una desagradable sorpresa. Personas de su entorno accedieron al interior y comprobaron que el inmueble se encontraba en unas condiciones deplorables. Sucia, sin interruptores de la luz ni enchufes en las paredes, sin radiadores, y con varios destrozos en el jardín.
Antes de abandonar el que fue su domicilio familiar, en el municipio madrileño de Villanueva del Pardillo, Toño dejaba las llaves puestas. En su interior solo quedaban bienes inservibles. Pero, ¿cuándo hizo la mudanza el mánager? ¿En qué momento se llevó sus objetos personales?
Sus vecinos aseguran no haber visto nada. Ningún movimiento fuera de lo común. Ningún camión de mudanzas en la entrada de la casa. ¿Acaso fue trasladando las cosas poco a poco? Personas que viven en la urbanización aseguran que se encargó de sacar sus enseres la semana pasada. Otros apuntan que lo hizo por la noche, para evitar ser inmortalizado por las cámaras de la prensa y sin ser vigilado por las miradas indiscretas.