Tita Thyssen (80 años) ha dado el paso de hablar en un medio de comunicación después de mucho tiempo. La baronesa ha querido contar muchas aspectos de su vida, muchos de ellos se conocían, pero otros no. Su vida está ahora en Andorra, donde disfruta de una vida plena. Ahí vive con sus hijas, de las que ha hablado abiertamente, sobre todo de su educación: "No les riño mucho porque quiero que sean normales", ha empezado diciendo de ellas.
Pero luego se ha enfocado en definir a cada una de ellas. Cuando están a punto de cumplir la mayoría de edad, Carmen y Sabina parecen tener claros sus caminos: "Carmen es una de las mejores alumnas del colegio, no deja de estudiar, y Sabina es artista, hace cómics y es capaz de imitar todos los acentos", dice Tita Thyssen orgullosa de cómo son cada una de sus hijas.
El día a día de Tita Thyssen en Andorra
La baronesa es muy dada a empezar su día desde muy temprano. Ella misma asegura que es algo que le apasiona: "Me gusta levantarme pronto, duermo con la ventana abierta para que entre el sol", ha empezado diciendo. Ante la pregunta de si viaja con mucha seguridad, ella asegura que "lo normal". Eso sí, deja claro que cuando pasea por Andorra lo hace con joyas, porque está "tranquila", pero que cuando salir de allí, prefiere ir sin ellas.
Pero cuando está en casa, el plan que más le gusta hacer es ir al mercado: "Me encanta ir al mercado, voy a la marisquería, a la carnicería, a la pescadería... Me encanta", ha declarado Tita Thyssen sobre lo que le gusta hacer cuando está en casa tranquila. La baronesa prefiere no delegar este tipo de gestiones que tienen que ver con las labores de la casa".
Carmen y Sabina, unas hijas muy diferentes
Tita Thyssen comparte su vida en Andorra con sus hijas, que cumplirán la mayoría de edad el próximo mes de julio. Carmen y Sabina son muy diferentes y la baronesa ha querido definirlas de manera pública cuando son contadas las veces que habla de ellas. Ella siempre dijo que la primera en nacer se llamaría como ella. Y así fue. De Carmen habla con mucho orgullo y deja claro que posiblemente sea la que herede todo su imperio: "La mayor quiere ir a la universidad, es una de las mejores estudiantes de su colegio. Ella solo estudia, estudia y estudia. Yo a veces le digo que pare, pero ella me dice: 'mamá, tengo no sé cuántos exámenes hoy'. Y yo le digo que 'sarna con gusto, no pica'.
Por su parte, Sabina ha tirado más por la rama del arte, una pasión que comparte con Tita Thyssen: "Sabina se llama como mi abuela, y ella es más artista, le encanta dibujar y hace cómics. Además, te coge el acento de cualquier idioma y te los imita". Ahora que están ambas a punto de cumplir 18 años, Tita sabe que tiene que lidiar con las experiencias de amor de sus hijas. De hecho, la baronesa asegura que le gusta que le cuenten sus experiencias.