Lleva años afincada en un espectacular chalet en la localidad barcelonesa de Castelldefels. Allí tiene fijado su nidito de amor con su pareja, Marta Roca. Durante décadas ha sido inmensamente feliz en su residencia, pero las pasadas Navidades, Chelo García Cortés decidió poner a la venta su propiedad. Así lo ha anunciado Kiko Hernández en el plató de 'Sálvame'. "Chelo García Cortés vende su casa por 1.300.000 euros", ha anunciado.
Sobre esta noticia, la colaboradora no ha querido precisar demasiados detalles. "Hago de mi vida lo que quiero. Se puso en su momento. No está puesta de ahora. Está desde el mes de diciembre", reconocía. Y dejaba caer: "A lo mejor está quitada ya de la venta... Ahora está quitada de la venta porque no me interesa venderla", puntualizaba. En efecto, al hacer una búsqueda en los principales portales inmobiliarios del inmueble, este no aparece. ¿Qué la ha llevado a venderla y, apenas un mes después, quitar la oferta? De momento, sigue siendo un misterio.
"Mi casa es mía. Cuento hasta donde me da la gana", ha zanjado la periodista. Lo cierto es que los rumores sobre la posibilidad de que quiera deshacerse de su casa llevan tiempo sonando con fuerza. El pasado 12 de enero, sin ir más lejos, Kiko Hernández le preguntaba si había decidido quitarse de encima el que ha sido su hogar para liberarse de sus problemas económicos. Entonces negaba la mayor: "No la vendo porque estoy a gusto en mi casa y no es el momento". No era fiel a la verdad, ya que en esas fechas sí estaba ofertada en internet.
Aunque trabaja en Madrid, Chelo García Cortés nunca ha querido renunciar a vivir en Barcelona, en una casa que tiene en el pueblo costero de Castelldefels. La casa, valorada en unos 1.600.000 euros, tiene vistas al mar. Eso sí, sobre su precio mucho se ha dicho mucho. En abril de 2019, cuando la colaboradora atravesaba serios apuros económicos, el equipo de ‘Sálvame’ hablaba con un experto inmobiliario. Este estimaba que el valor de “ronda entre los 450.000 y 500.000 euros" y afirmaba que "es una de las mejores zonas" de la localidad.
Muchos vecinos del municipio catalán, así como los medios de comunicación, conocen perfectamente dónde se encuentra la casa de Chelo. Está tan cerca del mar que resulta fácil identificarla. Esto ha provocado serias molestias en varias ocasiones. En agosto de 2019, por ejemplo, fue operada en una pierna tras sufrir una aparatosa caída. Esto provocó la llegada de un aluvión de cámaras a las puertas de su domicilio. "Lo único que os pido es que mi casa no la saquéis más, que esto parece Cantora 2 y no me hace gracia, tanto Marta como yo hemos contestado siempre", pedía entonces, suplicando algo de discreción a la hora de tomar imágenes de su chalet.