La actriz estadounidense ya dejó caer en una entrevista que prefería desvincularse temporalmente del cine para dedicarse plenamente a su familia.
Sandra Bullock está viviendo una situación muy difícil. Era durante el pasado lunes, 7 de agosto, cuando su pareja, Bryan Randall, fallecía a los 57 años tras haber pasado tres años luchando contra la esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Una complicada enfermedad que ambos habían llevado en el más absoluto hermetismo y por la que la actriz llegó incluso a dejar en un segundo plano su impecable trayectoria profesional.
Más allá de la importancia que tiene para Sandra Bullock su trabajo, si hay algo especialmente relevante en su vida es el bienestar de quienes la rodean. Así lo demostraba ella misma en una entrevista de 2021 para ‘Red Table Talk’ frente a Jada Pinkett, Willow Smith y Adrienne Banfield-Norris. En la charla en cuestión, la intérprete habló largo y tendido sobre el cariño que siente hacia el que fuera su compañero de vida, llegando a calificarle como "un santo" y a admitir que "evolucionó a un nivel que no es humano: "Él es el ejemplo que me gustaría que mis hijos tuvieran", aseguraba.
No cabe duda de que Sandra fue conocedora en todo momento del importante papel que tenía su pareja en su día a día. Es por ello que no tuvo reparo en desvincularse temporalmente del cine para dedicarse plenamente a su cuidado y a pasar junto a él los que fueron los últimos días de su vida. Un retiro temporal al que se sumaba también el desgaste profesional o síndrome de Burnout al que estaba enfrentándose: "El trabajo siempre ha sido constante y he tenido mucha suerte, pero me di cuenta de que se estaba convirtiendo en mi muleta", confesaba para ‘Entertainment Tonight’.
Los detonantes del retiro temporal de Sandra Bullock
En esa misma entrevista fue en la que también Bullock aclaró que parte de su drástica decisión estaba encaminada al pasar mayor tiempo con sus allegados: "Me tomo mi trabajo muy en serio, pero ahora solo deseo estar con mis hijos y mi familia las 24 horas del día y los siete días de la semana. Eso significa que voy a tomarme un tiempo de descanso", profundizaba, para después asegurar que "no quiere depender del horario de nadie más que el suyo".
Sin embargo, si algo tuvo claro desde el primer momento es que iba a respetar los deseos de Bryan Randall de mantener en secreto su enfermedad hasta que ahora, con su muerte, ha salido a la luz. Algo de lo que se han hecho eco los familiares del fotógrafo al dar la triste noticia de su pérdida: "Es con mucha tristeza que compartimos el fallecimiento de Bryan (…) Los que le queríamos hemos hecho lo mejor que hemos podido para respetar sus deseos", rezaba el comunicado.