Carlos Latre se ha sincerado sobre los problemas matrimoniales que atravesó junto a su mujer y por los que se separaron durante dos años. Da una lección de cómo afrontar la vida en pareja sin renunciar a la individualidad de cada uno
El nuevo programa de Jota Abril en Telemadrid, ‘Uno de tres millones’, ha tenido como primer invitado a Carlos Latre, quien acudía a la cita para hacer un repaso por su carrera profesional y hacer parada por algunas cuestiones personales que le han marcado en los últimos años. Y es aquí cuando ha entrado a colación uno de los peores momentos de su vida, cuando su matrimonio entró en crisis y los problemas con su mujer, Yolanda Marcos, eran tales que tuvieron que separar sus caminos para comprender después que debían estar juntos si querían ser felices, aunque también había mucho trabajo por delante para poder compartir una vida en común.
El que fuese el colaborador estrella de ‘Crónicas Marcianas’ y uno de los rostros mejor pagados de la televisión en su etapa dorada, se ha sincerado sobre los altibajos que ha experimentado con su mujer. De hecho, sus comienzos no fueron los más habituales y es que se conocieron cuando ella tenía planes de boda con otra persona y el amor hizo que sus vidas se pusiesen patas arriba para poder seguir las ordenanzas de su corazón: “Ella tenía una relación y una vida montada y el de las vocecitas” le trastocó los planes. Se conocieron en la radio y tras una sincera amistad surgió el amor. Tran unos años de noviazgo, se juraron amor eterno en una boda celebrada en 2004 y tres años después nacía su hija Candela.
Ahora, Carlos Latre habla maravillas de su esposa: “Es la mujer de mi vida. Mi mitad. Es mi muleta, mi apoyo. Somos un gran equipo sentimental y profesional”, sentenciaba Carlos Latre antes de detallar qué les sucedió en 2015 cuando su matrimonio atravesó graves problemas y estuvieron dos años viviendo por separado: “Hay momentos en los que necesitas hacer un reset, una pareja tiene que ir encajando las piezas mientras sigue evolucionando individualmente”, confiesa.
Para el considerado mejor imitador de voces del mundo, este tiempo de reflexión en su matrimonio no fue una crisis, sino algo natural propio de lo precipitado que fue su romance: “Yo no lo llamo ni bache, porque empezamos muy jóvenes”. Es por eso que Carlos Latre prefiere denominarlo “un reset” del que han salido reforzados al tener la oportunidad de conocerse mejor individualmente, antes de comenzar una vida en común: “Una pareja tiene que ir encajando las piezas y decidir estar juntos. La comunicación es vital” y es que el saber qué quiere en la vida y respetar los mismos deseos de su pareja le han ayudado a formar un vínculo ahora inquebrantable.
Ahora, Carlos Latre y Yolanda Marcos tienen un motivo para seguir adelante y luchar por su amor y este es su hija Candela, “lo más bonito que he hecho y mi mayor éxito”. El humorista confiesa que “nada importa si ella no está bien. Es un orgullo para nosotros, porque es una niña que tiene lo mejor de los dos. Tiene 15 años, aunque ella cree que tiene 25”, asegura emocionado, a la vez que adelanta que su hija ya ha mostrado su interés por comenzar su formación para convertirse en actriz: “Toda su vida va encaminada hacia eso, va siguiendo esos pasos. Para mí es maravilloso, el mundo del espectáculo es muy abierto de mente. Recibe a todo el mundo, a todos los tipos de personas y personajes”.