Carla Vigo ha dejado a su novio de la noche a la mañana y ya ha recogido todas sus cosas de la vivienda que compartían junto a los padres de él
Carla Vigo ha roto con su novio, Álvaro Uceda, tras un año y medio de relación. La revista SEMANA ha podido conocer en exclusiva que la sobrina de la Reina Letizia ha tomado la drástica decisión de romper lazos con el joven con el que incluso ha llegado a hablar de planes de boda ante la prensa, pero cuyos pasos ahora tienen como único objetivo distanciarse de él y no tanto acercarse al altar. Un gesto que sorprende a su círculo más íntimo, pero también a su horda de seguidores, quienes estaban ya acostumbrados a que constantemente utilizase las redes sociales para declararle públicamente su amor eterno e incondicional. Ahora parece que su romance sí encerraba condiciones. De la noche a la mañana, la que fuese el fichaje estrella de Rafael Amargo para sus últimas funciones teatrales no solo ha disuelto su relación, sino que incluso ha eliminado todo rastro de su año y medio de felicidad de las redes sociales. Ni rastro de los besos de los que antes presumía, de los mensajes agradeciendo su apoyo, de los felices momentos que compartieron juntos. Nada. Silencio.
La ruptura se ha producido este miércoles 12 de octubre en plena celebración por la Fiesta Nacional patria, aunque los problemas venían de lejos. SEMANA ha podido confirmar en exclusiva que Carla Vigo ya ha abandonado el domicilio en el que convivía con su novio, además de con los padres de éste, aprovechando que sus suegros no se encontraban en casa y con ayuda de personas de su confianza para llevarse los pocos enseres personales que atesoraba. Ni tan siquiera se ha despedido de sus suegros, los que se hacían cargo de sus gastos personales y cubrían todas sus necesidades, dado que ella no trabajaba y lo poco que ganaba con sus actuaciones lo empleaba en su propia formación artística. Se lo ha llevado todo para no volver, dejando a su pareja roto y sin saber muy bien cómo responder a la inesperada decisión que ha tomado y para la que parece que no hay marcha atrás.Se desconoce por el momento dónde ha ido a parar Carla Vigo, pues desde hace un año y medio vive en casa del que era su novio y sus suegros, al no tener otro lugar en el que vivir. Ella misma confesó en una entrevista que “nos conocimos por una aplicación y a las dos semanas vivíamos juntos”. Lo de vivir juntos fue muy prematuro, propiciado porque ella no encontraba dónde establecer su vida, pero ella lo justificaba de manera romántica al subrayar que lo suyo con Álvaro “fue un flechazo”. Ahora parece que el amor se le ha acabado a la sobrina de la consorte real y que ha encontrado otro lugar en el que vivir a cuerpo de reina, a la espera de que le llegue un trabajo con el que poder asegurarse su porvenir y sus propias necesidades básicas.
Los truncados planes de Carla Vigo
El deseo de Carla Vigo era dar ella misma la noticia de su ruptura de Álvaro, aunque buscaba sacar algún tipo de beneficio de ello. Este mismo jueves 13 de octubre la joven cumple 22 años y estaba buscando desesperadamente un local de moda en el que orquestar un cumpleaños por todo lo alto como así hizo en anteriores ocasiones. Sin embargo, parece no llegar a un acuerdo con la discoteca que le gustaría y está tratando de cerrar colaboraciones con otros locales que sufraguen todos los gastos de su celebración. Sobre la mesa de negociaciones está la exclusiva de que vuelve a estar de nuevo soltera, aunque incluso con esto de por medio parece que la cosa se le complica y aún no tiene cerrado dónde festejar su recién recuperada libertad y, de paso, su cumpleaños.
Carla Vigo tenía como sueño profesional ser actriz y bailarina, subirse a los grandes escenarios patrios y sentir el calor del público bajo los focos. Sin embargo, sin Rafael Amargo apostando por su carrera, su andadura artística se ha resentido. Pero en lo personal también se ha topado con problemas que le impiden llevar a término sus sueños. El más evidente ahora es su deseo de contraer matrimonio con su novio, como así decía querer el pasado mes de mayo mediante una exclusiva a ‘Lecturas’. Soñaba con una boda, “pero no por la Iglesia”, pero también hablaba de sus planes de ser madre, aunque reconocía que no estaba buscándolo y esperaba que la naturaleza le diese la sorpresa.