El verano no podía estar siendo mejor para Borja Thyssen y Blanca Cuesta. Tras pasar unos días acompañados de la madre del empresario, Tita Cervera, y de sus hermanas pequeñas, Sabrina y Carmen, ya era hora de que el matrimonio disfrutara de unas vacaciones un poco más íntimas para centrarse en sus cuatro hijos.
Verano balear
Una vez más, Borja Thyssen y Blanca Cuesta han apostado por Ibiza para disfrutar de unos días de vacaciones, en los que el sol y el mar son protagonistas. Si en las otras ocasiones que les hemos visto han estado acompañados por la madre de Borja y sus hermanas pequeñas, en esta ocasión pasaron una jornada más íntima.
Cuerpo al sol
A pesar de los muchos días que la pintora ha pasado al sol del mediterráneo todavía no ha conseguido un bronceado duradero.
Muy feliz
Pintar cuadros es la verdadera pasión de la nuera de la baronesa Thyssen, pero lo más feliz la hace es disfrutar de sus cuatro hijos: Sacha, Eric, Enzo y Kala, la única niña.
¡Al agua!
Como suele pasar en estos casos, los primeros en lanzarse al agua fueron los niños. A pesar de que estaban en alta mar y, por lo tanto, ninguno de ellos hacía pie, la jornada fue de lo más segura puesto que el matrimonio puso una barrera para que los niños no se fueran muy lejos.
De lo más pendientes
Como siempre, Borja y Blanca estuvieron muy pendientes de sus hijos y no dudaron en jugar y bañarse con ellos.
Todo un padrazo
El hijo de Tita se lo pasó en grande con Enzo, Eric y Sacha, a quienes ganó aguantando más que ellos en el agua.
Un equipo de empleadas a su servicio
El matrimonio contó con la presencia de varias amigas, que también llevaron a sus hijos, y de la ayuda de una persona de servicio.
El ojito derecho
Kala, que cumplirá 4 años en diciembre, es la única hija del matrimonio y se ha ganado ser el ojito derecho de sus padres y sus hermanos mayores.
Un ratito romántico
Estar rodeados de niños y tener un rato de intimidad puede parecer algo imposible, pero Blanca y Borja Thyssen consiguieron estarlo, pero por muy poco.
Todos juntos
Muy pronto llegó Kala demandando mimos de su madre, que no dudó el sujetarla entre sus brazos mientras que, a su vez, Borja Thyssen las custodiaba a ambas.
Muchas risas
Después de un chapuzón en el agua salada, nada mejor que una refrescante ducha para quitar la sal. Y si es con buena compañía y entre risas, mucho mejor.
Siempre en forma
Si hay algo que destaca de Blanca Cuesta es que siempre mantiene la misma figura. De hecho, su anatomía es parecida a la de la reina Letizia pues ambas tienen los mismos brazos musculados.