Llevaba algún tiempo alejado del foco mediático y muchos se preguntaban dónde estaba Bigote Arrocet. Pues bien, el humorista está fuera de España, concretamente en Brasil, donde se encuentra gestionando un negocio relacionado con la energía eólica. Pero tal y como nos confirma, en exclusiva, no está solo, sino acompañado por su nueva pareja sentimental. ¿Y quién es ella? Pues una atractiva mujer de mediana edad, que parece haberle devuelto la ilusión y la sonrisa. Él mismo nos lo confirma: "Estoy saliendo desde hace tiempo con una persona que no es española, es de otra nacionalidad, y se encuentra conmigo en tierras brasileñas".
¿Es una relación seria o un ligue?
Estamos juntos y muy bien, pero ella no tiene nada que ver con el universo mediático y prefiere mantenerse en el anonimato.
¿Cuánto tiempo estarás fuera de España?
Bastante, porque desde Brasil viajaré a Buenos Aires, después a Lima, Santiago de Chile, Londres, y acabaré regresando a Madrid. Es un viaje de negocios mezclado con algo de placer. No me queda más remedio que ir de un lado para otro por trabajo.
¿Has visto a tu hija Gabriela en 'Supervivientes'?
No pude. Me fui de Madrid antes de que ella entrara en el reality, pero me llamó para contarme que iba a participar en el concurso. Espero que llegue muy lejos.
Tu estuviste en la isla. ¿Le has dado algún consejo?
No le hacen falta. A 'Supervivientes' uno va a pasar hambre, a que te piquen los bichos, aguantar la lluvia y a intentar que haya buena onda con los otros concursantes. La vida está muy difícil y los que participan allí tienen la suerte de que les paguen bien, cuando en el mundo hay gente que no tiene para comer. Ojalá que a algunos les temple el alma la isla.
Gabriela y las hijas de María Teresa Campos, de tu ex, ya están desatando una guerra mediática…
En eso no me meto, a mis hijos les he dejado siempre plena libertad para que actúen como quieran.
Pero muchos dicen que es un enfrentamiento absurdo.
Me da lo mismo, allá ellas. Cuando hay guerra es porque alguien quiere pelear… y punto. Y la otra parte se tendrá que defender. Es lógico que Terelu y Carmen apoyen a su madre, y mi hija a mí.
Las hermanas Campos te han lanzado alguna que otra crítica...
No me preocupa lo más mínimo. Que digan lo que quieran, yo tengo mi conciencia tranquila. Estuve seis años vi-viendo con su madre, fui muy feliz con ella, le deseo lo mejor, y siento que no le den el lugar profesional que le corresponde, porque es un mito de la tele. Es una periodista maravillosa, pero me molesta que han pasado cuatro años desde que rompimos, y sus hijas siguen metiéndome conmigo.
¿No te has enterado de que se encuentra mal de salud?
Me da mucha pena esa situación, porque le tengo un gran cariño. Además, era una mujer mucho más divertida que yo, tenía mucha gracia. Y era súper entretenida. Creo que quizás le falta hacer cosas y trabajar. Me parece que eso la animaría muchísimo.
Desgraciadamente, ya no sale de casa, ni siquiera coge el teléfono a sus amigas ni juega con ellas a las cartas…
Siento mucho dolor por lo que me estás contando. Nunca me imaginé que pudiera estar así. Para nada. Supongo que las hijas se estarán preocupando mucho por ella, que la cuidan como se merece. Es lo correcto. Me queda un recuerdo súper bonito de María Teresa, compartimos muchas vivencias.
Pues en esa familia hay quien te ha visto siempre como un oportunista.
(Se ríe) Me da mucha risa. Te voy a contar algo: en los seis años que yo viví con Teresa, sus hijas fueron a verla, como mucho, doce veces. Es más, a ella le dolía que Carmen no ocupara la casa que mandó construir para ella al lado de la suya. O sea que esas dos señoras no me cuenten cuentos.
¿Te gustaría encontrarte con María Teresa y mantener una conversación con ella?
Lo que teníamos que aclarar ya lo hicimos en su día. Repito: yo jamás terminé con Teresa a través de un Whatssap. Eso es mentira.