Bella Hadid está hundida. Lo ha pasado muy mal, pero ha encontrado un resquicio de fuerza en sus adentro para tomar los mandos de sus redes sociales y confesar lo que lleva sufriendo en silencio desde hacía años: una profunda depresión. La modelo, una de las mejor pagadas del mundo, se ha visto sumida en un proceso de tristeza que le hace llorar sin consuelo cada noche, como así demostraba con una colección de nueve fotografías en las que las lágrimas brotaban de sus ojos. Después de su confesión más dura, en la que mostró su fragilidad al mundo para dar normalidad a las víctimas de enfermedades mentales, la joven maniquí ha decidido relajarse este fin de semana en las playas de Miami tras acudir a la boda de una amiga.Así, hemos podido ver a Bella Hadid desconectar de la estresante rutina que le tiene las fuerzas mermadas. También recuperar la sonrisa en compañía de sus amigas, con las que compartió momentos de relax y diversión que le ayudan a salir del momento duro en el que se encuentra inmersa. Pero, sobre todo, la modelo ha presumido de cuerpazo al sol de Miami con un escueto bikini con estampado de leopardo y que apenas cubría las partes clave de su anatomía. Los justo y necesario para salvarse de la censura, pero demostrando por qué es una de las modelos internacionales más cotizadas del mundo y es que su cuerpo quita el hipo a propios y extraños. Eso sí, el envoltorio es precioso, pero el interior ahora es lo que más le preocupa a la propia Bella Hadid, que lucha contra unos demonios internos que le han sumido en una depresión, con la que lidia con ayuda de psicólogos y terapeutas.
“Ese sentimiento de pensar que eres lo suficientemente bueno o de estar inseguro sobre tu arte es natural, pero al mismo tiempo, siento que se enseña. Todos los seres humanos son diferentes, cada uno de ellos tiene algo muy especial y único que ofrecer. Y la gente se olvida de que todo el mundo se siente básicamente igual: perdido, confundido, sin saber muy bien por qué está aquí. Esa ansiedad que todo el mundo está sintiendo y tratando de cubrirla de alguna manera. Vamos a unirnos en nuestros defectos. En nuestras inseguridades, en nuestra alegría, en nuestra felicidad y aceptarlo todo como hermoso y natural”, invita Bella Hadid al mostrar su fragilidad para animar al mundo a que haga lo mismo en su publicación en Instagram en la que se mostraba destruida, presa de las lágrimas.
“Esto es más o menos mi día a día, cada noche desde hace unos años. Las redes sociales no son reales”, denuncia la modelo, que quiere dejar claro que si sus fans no la ven llorar no es porque no lo haga, sino porque ha decidido no mostrarlo. Hasta ahora. “Para cualquiera que esté luchando, por favor, recuerden esto. A veces todo lo que tienes que escuchar es que no estás solo. Así que de mí para ti, no estás solo. Te quiero, te veo y te escucho”, continúa.