La casa en la que reside Lamine Yamal: básica, compartida y situada en Barcelona

Lamine Yamal ha sido el jugador del Barça que ha batido récords en esta Eurocopa. El joven de 17 años ha sido el jugador más joven que ha jugado en una Eurocopa y que ha marcado un gol y asistido. Además, también ha sido el que antes ha llegado a 50 partidos con el Barça y el más pequeño en participar en las eliminatorias de la Champions. Todo un logro que ya lo han convertido en la joven promesa de uno de los deportes más seguidos del mundo. Pero, ¿cómo es la vida de Lamine Yamal fuera del fútbol? El joven vive en La Masía del Barça desde hace más de diez años, la escuela de futbolistas más famosa el mundo.

Así es La Masía del Barça

La Masía es una residencia de 6.000 metros cuadrados situada en la Ciudad Deportiva Joan Gamper y está equipada con todo lo necesario para formar a futbolistas de éxito. El edificio cuenta con cinco plantas, tres de las cuales están reservadas a la cantera del equipo, y las otras dos a usos futuros. Hay disponibilidad de habitaciones tanto dobles como individuales, gimnasio y zonas de estudio. Las habitaciones individuales están adaptadas a las necesidades físicas de los jugadores y pueden ofrecer camas a medida. También, tienen un centro especializado para rehabilitar todo tipo de lesiones que puedan tener los deportistas. "Cuenta con unas instalaciones inmejorables, pensadas exclusivamente para optimizar la formación intelectual, personal y social de los deportistas", cuentan desde FC Barcelona. 

Uno de los puntos fuertes de La Masía es que está diseñada para formar a los futbolistas del futuro del Barça, ya que este centro está diseñado par inculcar los valores y la cultura tradicional del equipo a todos sus jugadores. Además, todas las estancias de La Masía están diseñadas para ayudar a la concentración y al estudio de los alumnos.

La sencilla habitación individual de Lamine Yamal

La habitación de Lamine Yamal destaca por ser sencilla y muy luminosa. Los espacios blancos predominan a lo largo de todo el edificio y también en su habitación que cuenta con lo necesario para vivir sin grandes lujos. Algunas de las estancias, como es el caso de esta, tienen cocina integrada y un escritorio destinado al estudio. La habitación está decorada en tonos neutros, con cuadros con pinturas suaves y plantas naturales sobre las estanterías. Todas las habitaciones están equipadas con aire acondicionado y una alta hilera de amplios armarios de almacenaje de madera natural de un tono claro. Para La Masía es esencial que el orden y la limpieza estén asegurados, si esto no se cumple, es posible que donen la ropa y todo el desorden que el equipo de limpieza se encuentren por el suelo.

La Masía también cuenta con unas privilegiadas instalaciones comunes donde los jugadores comparten momentos entre sus compañeros. En estas instalaciones es donde están situados los carteles y las palabras con los valores del Barça intentando inculcar el esfuerzo y la humildad ante todo. El personal educativo, también insiste en seguir una estrategia de lenguaje sustituyendo unas palabras por otras para reformar las conductas de los jugadores en el fútbol, por ejemplo, decir "recuperar la pelota" en vez de "robarla", o rechazar directamente términos como que un partido es una "guerra".

En cuanto al estilo decorativo de la residencia, es de estilo moderno, con decoración minimalista y todas las estancias están bañadas de un blanco impoluto para transmitir una mayor sensación de limpieza, amplitud y orden. Las estancias están distribuidas en pequeños espacios de reunión situando amplios sofás de estilo moderno con capacidad para varias personas para incentivar las relaciones interpersonales entre los alumnos y el trabajo en equipo. La decoración invita a la concentración y al estudio.  Al final, el objetivo de La Masía es formar a las futuras estrellas del fútbol y de sus equipos, por ello, pretenden darle a sus alumnos la mejor formación y estancia posible.

Lamine Yamal, de 17 años recién cumplidos, nació en el municipio catalán de Esplugues de Llobregat, de padre marroquí y madre ecuatoguineana, pero su familia no tardó en mudarse a Mataró, al barrio de Rocafonda. El joven cuenta con un salario de 139 mil euros mensuales, que suman un total de 1,67 millones de euros al año.