Ángel Llàcer, ingresado en el hospital por una grave infección

Ángel Llàcer ha sufrido un inesperado revés en su salud. Estos días atrás, el humorista tuvo que ser ingresado en la Clínica Ruber Internacional de Madrid a consecuencia de una grave infección. Un durísimo varapalo que puso en jaque su vida tras haber viajado a Vietnam de vacaciones, donde sufrió una intoxicación bacteriana por shigela. Sin embargo, todo parece haber quedado en un susto y el propio protagonista ha hablado de este fatídico episodio con todo lujo de detalles.

Como colaborador del programa de radio ‘El matí de Catalunya Ràdio’, Ángel Llàcer ha tomado la palabra para desvelar los motivos por los que ha tenido que permanecer hospitalizado: “Me empecé a encontrar mal y me ingresaron. Lo he pasado muy mal”, ha comenzado explicando, visiblemente nervioso por el testimonio que iba a hacer público y que ha hecho tambalear por completo los cimientos de su vida. 

El actor se sincera sobre su estado de salud: "Me ingresaron. Lo he pasado muy mal"

Sus palabras no han quedado ahí, y Ángel ha seguido dando detalles sobre su estado de salud. Y es que, tras la intoxicación bacteriana en su viaje por el país del Sudeste Asiático, los médicos le pusieron antibiótico durante cinco días. Sin embargo, el tratamiento no hizo el efecto deseado y la bacteria se quedó en el cuerpo jurado de ‘Tu cara me suena’, que no podía llegar a imaginar lo que sucedería después. 

La situación de Llàcer se complicó, hasta el punto de no saber por qué estaba experimentando cierto malestar físico que le impedía llevar a cabo su rutina: “Los médicos no sabían qué tenía. He tenido dolor de estómago, hacía caca con sangre y cada vez tenía más fiebre. Estaban muy preocupados”, ha asegurado. Sin embargo, el equipo de profesionales de la Clínica Ruber de la capital pudo conocer la razón por la que se encontraba mal, y poner medidas. Aún así, el humorista tuvo que permanecer ingresado en el hospital en cuestión durante una semana: “Me han dado tres antibióticos y me tengo que quedar en el hospital durante una semana”.

Por ahora, la prioridad de Ángel es su estado de salud. Por ello, permanecerá alejado de la televisión, y por ende, de su puesto de trabajo en ‘Tu cara me suena’ hasta nueva orden. El catalán ha dejado claro que para él su bienestar es lo primero, y para conseguirlo por completo, tendrá que estar hospitalizado hasta que los médicos lo consideren oportuno. A lo largo de estos días, los profesionales podrán hacer un seguimiento de su evolución de manera m��s cercana, para así deliberar cuándo puede retomar su vida con normalidad tras este susto. 

Ángel Llàcer y su 'annus horribilis' marcado por los "abandonos" personales

A buen seguro, Llàcer seguirá pendiente de todos los movimientos que se lleven a cabo en ‘Tu cara me suena’. Fue el pasado viernes, 12 de abril, cuando el programa de Antena 3 dio pistoletazo de salida a una nueva edición que ha traído a la palestra un sinfín de rostros conocidos. El espacio televisivo ha sido sin duda una de las grandes alegrías para el catalán en un año marcado por los “abandonos” personales. Así los definía él mismo en una entrevista para El Español, en la que hablaba largo y tendido sobre las numerosas “pérdidas” que han marcado un antes y un después en su vida.

“Se murió mi perro hace dos meses, he llorado lo más grande, pero ya está. A veces tengo un poco de bajón, le echo de menos, lloro un poquito, pero hay que seguir con la vida”, se sinceraba. Por si fuera poco, también ha tenido que enfrentarse a la separación de su ahora expareja: “Estoy en un momento en el que tengo todas las casillas de mi vida por llenar, porque he tenido un año de abandonos, como el de mi perro, mi pareja o mis vecinos”, continuaba. Pese a todo, confesó sentirse muy “optimista” al mirar al futuro con esperanza. 

Lo que no podía llegar a imaginar por aquel entonces, es que la vida volvería a azotarle de nuevo, esta vez en términos de salud. Ahora que ha ganado la batalla a una grave infección que podría haber acabado con su vida, Ángel se siente aún más seguro de sí mismo y está dispuesto a seguir adelante. Tras los altibajos vividos, al humorista no le queda más remedio que seguir avanzando tanto a nivel profesional como personal.