Amber Heard pone tierra de por medio y se muda a Madrid. La actriz huye de todo el ruido mediático que ha protagonizado tras el juicio contra Johnny Deep, su ex pareja, y toma una decisión determinante. Tras la celebración de dicho acto, tiene que hacer frente al pago de 10 millones de dólares como indemnización y 5 por daños punitivos al "haberlo difamado", tal como un juzgado estadounidense decretó. Al haberse declarado insolvente, pues su patrimonio total oscilaría entre los 2 y los 8 millones, decide venirse a España e instalarse en una exclusiva zona de la capital española. Ya conoce algunos barrios de la ciudad y aprovecha su estancia aquí para visitar lugares tan especiales como el Museo Sorolla.
La actriz saluda a sus fans a la salida de dicho museo después de haber acudido a realizar una visita como cualquier otra persona. Sin esconderse, ni con nada que impidiera reconocerla, ha recorrido las galerías de la estancia llenas de obras de arte especiales. Los medios británicos señalan que Amber Heard no tendrá ningún problema en vivir en España. De hecho, señalan que "habla español y que quiere vivir como una más". 'El programa de Ana Rosa' descubre que la actriz hace una vida completamente normal, que la han visto corriendo por el céntrico parque de El Retiro, al mismo al que acude con su hija.
La nueva vida de Amber Heard en Madrid y su chalet de cuatro plantas
Atrás queda Johnny Deep y todo lo que ha rodeado su denuncia y su derrota judicial. Desde que se salió la resolución Amber Heard se escondía de los medios internacionales y los proyectos profesionales se reducían drásticamente. A falta de nuevas informaciones, pues siempre ha demostrado el interés en recurrir lo que dijo el juzgado, ahora quiere empezar una etapa nueva al otro lado del charco. La actriz de 'Aquaman', como apunta el programa de Telecinco, vive , al menos de momento, en un chalet que se divide en cuatro plantas y cinco habitaciones. Los nuevos vecinos son los que desvelan que las casas en esta zona se sitúan cerca de los dos millones de euros, reformas a parte. La seguridad del entorno donde se ubica le proporcionará ese espacio fuera de la esfera pública, aunque no se esconda a la hora de fotografiarse con quien le reconozca.