Hace 35 años que Alfonso de Borbón y Dampierre perdió la vida mientras descendía entre la bellas montañas de la estación de esquí de Beaver Creek, Colorado. Falleció a los 52 años por un cable de acero que segó su cuello y que un empleado de la estación había colocado para instalar una pancarta. Un trágico accidente que se produjo tan solo cinco años después de otra fatal desgracia que nunca superó y que acabó con la vida de su hijo, Francisco de Asís.
Separado de Carmen Martínez Bordiú y a cargo de sus hijos
En 1971 se celebraba una de las bodas de mayor abolengo de la España de entonces, la nietísima de Franco, Carmen Martínez Bordiú, contraía matrimonio con el primo de Juan Carlos de Borbón, Alfonso de Borbón.
En plena dictadura y en una sociedad marcada por el conservadurismo, la pareja prometía convertirse en una familia ideal y duradera, nada más lejos de lo que pocos años después sucedió. En 1979, y con dos hijos, Carmen decidió abandonar a su marido y dejarle a cargo de sus hijos para seguir al anticuario francés Jean-Marie Rossi, 22 años mayor y de quien se había enamorado perdidamente.
La gran desgracia en la vida de Alfonso de Borbón
Pero a Alfonso de Borbón le esperaba el capítulo más trágico de su vida, y el que me marcó para siempre: la terrible muerte de su hijo mayor. Curiosamente los momentos más trágicos de su existencia han tenido como telón de fondo su gran pasión: el esquí. Después de un fin de semana en la estación de Astún junto a sus dos hijos, el Duque de Cádiz sufrió el accidente en el que nunca nada volvió a ser igual. Se produjo en el municipio navarro de Corella cuando su vehículo chocó contra un camión durante una fría noche del mes de febrero.
La llamada del Rey Juan Carlos a Carmen Martínez Bordiú
El matrimonio entre el Duque de Cádiz y la nieta de Francisco Franco se había roto dos años atrás. Fue el Rey Juan Carlos quien llamó a Carmen Martínez Bordiú para comunicarle el terrible accidente de coche que habían sufrido sus hijos. "Me dijo solo que había tenido un accidente, pero yo ya sabía que había muerto", afirmaba Carmen Martínez Bordiú en 2015 durante una entrevista con Bertín Osborne.
Los niños, que estaban acompañados por su institutriz, viajaban en un Citroën CX y su padre iba al volante. Alfonso de Borbón y Dampierre se saltó un stop en pleno cruce con la autopista y su vehículo chocó estrepitosamente contra un camión. Todos los ocupantes salieron despedidos a excepción de Francisco quien permaneció en el interior, aplastado por los hierros en los que se había convertido el coche. Dos días después del accidente falleció en la Clínica Universitaria de Pamplona.
El exmarido de Carmen Martínez Bordiú se debatió durante semanas entre la vida y la muerte. No pudo estar presente en el funeral de su hijo y este fatal incidente marcó su vida. Nunca superó aquel suceso y cinco años después murió también de forma trágica mientras esquiaba con algunos amigos, entre ellos, el excampeón austriaco de esquí alpino Tony Sailer.
Un nuevo episodio que conmocionó a la España de la época y que estuvo envuelto en polémica. Los medios locales calificaron en un primer momento el suceso de "atentado". Las teorías no cesaban y la policía apuntó a que la muerte podría tratarse de un "homicidio". El asunto se resolvió en privado. La familia Borbón y la organización del campeonato de esquí -que se celebraba en la estación donde murió- llegaron a un acuerdo confidencial. Nunca se ha sabido la cantidad que abonaron a la familia Borbón por el fatal incidente. Años después la madre del Duque de Cádiz, Emanuela de Dampierre, pronunció su propia teoría: "Con sinceridad, creo que se trató de un trágico accidente".
Alfonso de Borbón: de la renuncia al trono de su padre a la boda con Carmen Martínez-Bordiú
No hay que olvidar que la vida del Duque de Anjou viene señalada por las obligaciones dinásticas a las que su padre, Jaime de Borbón, renunció en 1933. El segundo hijo del Rey Alfonso XIII y Victoria Eugenia se quedó sordo con cuatro años y este fue el motivo por el que rehusó a sus derechos de sucesión al trono de España tanto para él como para sus descendientes.
La boda de Alfonso de Borbón y Dampierre con Carmen Martínez-Bordiú volvería a sacar a escena viejos fantasmas y no faltaron las voces que veían una estrategia del Duque de Cádiz para buscar el trono. La boda se celebró el 8 de marzo de 1972 en la capilla del palacio de El Pardo. Un gran enlace al que fueron invitados las distintas casas reales europeas. Entre los mil invitados, Raniero de Mónaco y Grace Kelly.
El matrimonio duró siete años y emprendió caminos separados en 1979. Carmen Martínez Bordiú confesaría que aquella boda nunca debió celebrarse. "Para Alfonso la ruptura fue tremenda y no quería que me fuese", afirmó durante una entrevista con Bertín Osborne en 2015. Ella arrancó una nueva vida en París junto al anticuario Jean Marie Rossi, su segundo marido, y padre de su hija pequeña, Cynthia Rossi.
En febrero de 1984 ocurrió la primera gran tragedia que marcaría tanto la vida de Luis Alfonso de Borbón y Dampierre como Carmen Martínez Bordíu cuando perdieron a su hijo mayor. La nieta de Franco ha explicado en más de una ocasión aquel fatal episodio de la siguiente manera: "El dolor era demasiado fuerte. Se me secaron las lágrimas".