Este jueves, Ainhoa Arteta ha concedido su primera entrevista en un televisión tras los graves problemas de salud que sufrió el pasado año y que casi le cuestan la vida. "Lo ha pasado muy mal", ha recordado Pablo Motos antes de arrancar la entrevista. No le falta razón. La cantante lírica regresa a los escenarios después de vivir los momentos muy complicados.
"Estamos aquí para celebrar la vida porque casi te mueres", destacaba el presentador. "No me enteré, me enteré después. Tuve una sepsis, una septicemia... Tuve un cólico nefrítico que se complicó. Me dio un fallo multiorgánico, me inducen al coma durante cuatro o cinco días. Del coma me salvé por los pelos. Habían intentado todo tipo de remedios", respondía la artista. Su cuerpo estaba reaccionando mal al tratamiento que le aplicaban los médicos. "Me moría, no había manera". La situación fue tan crítica que el personal sanitario decidió actuar de manera drástica: "O esto o se muere... No nos queda de otra. De esto me enteré después", ha relatado. "Me tuvieron que llevar en helicóptero al Virgen del Rocío".
Lo que vio Ainhoa Arteta estando en coma: "Era un silencio total"
Lo último que recuerda de su ingreso fue "cuando escuché 'hay que intubarla". Entonces aún estaba despierta y era consciente de que el tubo "pasa por las cuerdas vocales y es peligroso para un cantante". La vasca ha rememorado lo vivido con enorme entereza. Y con grandes dosis de humor. "La única manera de salir de estas cosas es con fuerza mental", decía. "Como Rafa Nada, que se pasó 5 horas jugando y no dejó de pensar ni un momento en la bola. Mi vida tiene que continuar. Me duela o no me duela, tengo que seguir".
En su narración, Ainhoa Arteta ha desvelado que tuvo una experiencia muy particular durante el tiempo que estuvo en coma. "No vi un túnel, no vi ninguna luz", destacaba. "Sí vi un espacio. Estaba un espacio que era azul oscuro intenso con estrellas, con mucha luz, a la vez que era oscuro. Me veía suspendida y era un silencio total. Vi pasar una cosa roja por debajo, no sé si era el infierno. Igual me estoy haciendo pájaras mentales. Pasó y se fue y ahí me quedé yo en esa zona".
La cantante de ópera ha mostrado ante las cámaras su dedo amputado con total naturalidad. Del mismo modo ha respondido a todas las preguntas que le ha hecho el presentador por su dolencia. Este quiso saber si siente el "dolor del miembro fantasma". Un asunto al que ella ha contestado con absoluta franqueza: "El famoso dolor neuropático tiene que ver con el cerebro y para ese dolor tiene que ver con el cerebro. Me pasa muy a menudo. El otro día me dolía la punta de este dedo (señalando el dedo apuntado), y ya no lo tengo. Este dolor tiene tanto que ver con el cerebro que si estás nervioso o agitado, el dolor aumenta de una manera brutal".