El Rey Carlos ha vuelto a la vida pública, y lo ha hecho por todo lo alto. Tras haber anunciado su retorno, el monarca británico se ha dejado ver este mismo lunes junto al Príncipe Guillermo por un motivo muy especial. Una reaparición que ha tenido lugar tan solo unos días después del viaje del Príncipe Harry a Londres, el cual no estuvo exento de polémica. 

El Rey Carlos muy sonriente

El Rey Carlos muy sonriente.

Gtres

El paso al frente del Príncipe Guillermo en su camino a la primera línea de la Corona

El centro de Aviación del Ejército en Middle Wallop, concretamente en Hampshire, ha sido el escenario donde se han reunido el Rey Carlos y el Príncipe Guillermo. En una jornada dotada de un gran significado para el Príncipe de Gales, su padre le ha otorgado un título de lo más especial. Se trata del puesto de Coronel en Jefe del Cuerpo Aéreo del Ejército. Un nombramiento que el soberano había ostentado durante varias décadas y que ahora ha confiado a su sucesor, que poco a poco va teniendo más protagonismo en la primera línea de la Corona.

Cabe destacar que esto supone un espaldarazo en toda regla por parte de Carlos III y el Príncipe Guillermo a Harry. El heredero al trono será quien se ocupe del puesto principal en el Cuerpo Aéreo del Ejército, lo cual incluye la antigua unidad en la que servía su hermano, el Escuadrón 662. Durante una temporada, el duque de Sussex sirvió como piloto del helicóptero Apache en Afganistán, motivo por el que se creía que el monarca delegaría en su hijo menor. 

El Rey Carlos junto al Príncipe Guillermo

El Rey Carlos junto al Príncipe Guillermo.

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Por si fuera poco, el soberano no ha recordado en ningún momento al Príncipe Harry cuando ha entonado su discurso en esta reaparición pública: “Solo quería decirles que es una gran alegría estar con ustedes, aunque sea brevemente, en esta ocasión. Pero también, me entristece mucho después de 32 años de conocerlos a todos y admirar todas sus actividades y logros a lo largo del tiempo que he tenido la suerte de ser Coronel en Jefe del Ejército”. Además, se ha deshecho en elogios ante su primogénito: “Espero que vaya viento en popa en el futuro con el Príncipe de Gales como nuevo Coronel en Jefe. Lo bueno es que es muy buen piloto, lo cual es alentador”, ha asegurado.

Carlos III abre su corazón al hablar de la peor parte de su enfermedad

Para poner el broche de oro a su discurso, Carlos III ha querido agradecer a todos los allí presentes el apoyo recibido: “Cuídense mucho y no puedo decirles lo orgulloso que me he sentido de haber estado involucrado en esto durante todo este tiempo. Gracias”. Un momento de lo más emotivo y cómodo para el soberano, que incluso ha hablado sobre la quimioterapia a la que está haciendo frente con el veterano del ejército, Aaron Mappebleck.

En un intento por parecer lo más cercano posible ante los que han sido sus compañeros hasta ahora, el monarca ha confesado uno de los efectos secundarios que ha notado a raíz de su tratamiento. Se trata de la “pérdida del gusto”, algo que podría estar afectando duramente a su rutina, especialmente alimenticia. Sin embargo, y a juzgar por su rostro y su sonrisa, todo apunta a que Carlos III está tomándose las circunstancias con la mayor naturalidad posible, e incluso sacando el lado positivo a todo. 

La relación entre el Príncipe Harry y su padre, cada vez más distante

Sea como fuere, lo cierto es que lo sucedido esta mañana tan solo ha evidenciado que la relación paternofilial cada vez es más distante. Con motivo del décimo aniversario de los Juegos Invictus, el Príncipe Harry se desplazó hasta Londres, pero no tuvo ningún tipo de contacto con su padre. Al menos, no ha trascendido que entre ellos haya tenido lugar una reunión en la que poder acercar posturas y dejar atrás lo sucedido en el pasado. 

Además, ‘The Sunday Times’ ha revelado que Carlos III ofreció a su hijo una residencia oficial de la Familia Real para que se alojara mientras durara su estancia en Reino Unido. Una facilidad a la que el duque de Sussex prefirió negarse rotundamente, eligiendo un hotel para hospedarse y permaneciendo firme en sus convicciones tras haber salido de La Firma hace más de cuatro años. El hijo menor de Lady Di no dispone de ninguna residencia oficial tras haber renunciado a sus funciones como miembro de la monarquía, razón por la que tampoco quiere gozar de sus privilegios.