El Rey Carlos III de Inglaterra ha sido diagnosticado de cáncer, según ha informado el Palacio de Buckingham en un comunicado emitido a ultima hora de la tarde del lunes 5 de febrero. Como ya han confirmado diferentes medios británicos de renombre, entre ellos el 'Daily Mail' o 'The Telegraph', no se trata de un tumor maligno de próstata, sino de otro tipo de cáncer descubierto durante su último paso por el hospital, donde estuvo ingresado tras someterse a una intervención quirúrgica por el agrandamiento de esta zona del cuerpo. "Las pruebas de diagnostico posteriores han encontrado una forma de cáncer. Por consejo de los médicos, pospondrá todos sus compromisos de la agenda oficial", especifica el texto. 

"Durante la reciente estancia del Rey en el hospital para un tratamiento benigno de agrandamiento de próstata, se notificó otro problema por separado. Las pruebas posteriores han acabado identificando un tipo de cáncer", reza el comunicado emitido por la casa real británica en un ejercicio de trasparencia sobre el estado de salud del rey Carlos III y para evitar "especulaciones". Aunque el texto no especifica qué tipo de tumor maligno padece el monarca, ya ha comenzado los tratamientos correspondientes este mismo lunes para luchar contra la enfermedad. 

La nota difundida por Buckingham continúa: "Cuando termine este periodo (el del tratamiento), su Majestad retomará sus asuntos de Estado, como hace de manera habitual". El Palacio ha agradecido al equipo médico por la reciente operación a la que se tuvo que someter Carlos III, así como todas las atenciones recibidas en su posterior recuperación. El comunicado añade que el monarca "permanece positivo con su tratamiento y espera volver a sus compromisos públicos lo antes posible". 

El rey Carlos III abandona el hospital

El rey Carlos III a la salida del hospital.

Gtres.

El rey Carlos III llama a sus hijos, Guillermo y Harry, para informarles de su diagnóstico

La noticia sobre el diagnostico de cáncer del rey Carlos III ha pillado a todos sus conciudadanos por sorpresa. Nada hacía prever este giro de los acontecimientos a tenor del buen humor que se gastaba Carlos III tras recibir el alta hospitalaria. El monarca salía del hospital The London Clinic el pasado 29 de enero, por su propio pie y apenas tres días después de ser intervenido de la próstata. Lo hacía por la puerta principal, muy sonriente y en compañía de su inseparable mujer, la reina Camilla. No dudó en saludar desde lejos a todos los curiosos ahí agolpados, pendientes de la salud de su majestad, y bromear con la prensa.

Era precisamente en este mismo centro, situado en la capital londinense, donde también fue operada Kate Middleton de un problema abdominal del que no se han dado más detalles. Su nuera recibía el alta tan solo unas horas antes de que lo hiciera él y, por el momento, se mantiene alejada de sus quehaceres oficiales. Ha sido el propio Carlos III quien ha informado a sus hijos, Guillermo y Harry, de su  diagnóstico y de los pormenores del tratamiento que está recibiendo. A pesar de que su relación con el príncipe Harry no es la mejor desde su polémico documental en Netflix, el monarca no ha dudado en llamarle personalmente para contarle la noticia. Está previsto que, en los próximos días, el duque de Sussex ponga rumbo a Inglaterra desde California (Estados Unidos), donde reside, para reunirse con su padre y acompañarle en estos momentos complicados.