Hace solo unas horas la Reina Sofía se convirtió en la absoluta protagonista del concierto de Raphael. La emérita fue aplaudida y vitoreada por el público, no obstante, este momento de ocio solo duró la actuación. Antes de terminar, se fue por un motivo de peso, pues le esperaba un vuelo rumbo a Atenas. Tras conocer el ingreso de su hermano Constantino, quien se ha confirmado que ha sufrido una neumonía un enema pulmonar, la madre de Felipe VI ha querido apoyarle en este problema de salud que tantos titulares ha copado en las últimas horas. Así lo ha avanzado en primicia 'Informalia'.
Si bien Constantino se encuentra estable, lo que si mantienen fuentes de la prensa griega es que está recibiendo oxígeno. Un ingreso en el que está siendo acompañado por su esposa, Ana María de Grecia y uno de sus hijos, el príncipe Nicolás. Fue hace tan solo unos meses, en concreto a finales de octubre, cuando se le vio por última vez ante los medios de comunicación. Acudió a la boda de uno de sus hijos y en todo momento mostró una gran sonrisa, sin esperar que tiempo después tendría que ser ingresado debido a su delicado estado de salud. Fue en silla de ruedas, pero nada hacía presagiar esta hospitalización.
Este contratiempo del Rey Constantino ha preocupado a su familia, en especial, a aquellos que se encuentran a miles de kilómetros, ya que no pueden estar cerca de él ni vigilar su ánimo. La Reina Sofía no lo dudó y este jueves inició el viaje que le acercaría de nuevo a su hermano, dándole igual que les separen más de 2.400 kilómetros de distancia. Se desconoce, de momento, si el Rey Juan Carlos hará también las maletas para comprobar en persona cómo se encuentra Constantino, aunque fuentes cercanas a él confirman al citado medio que se encuentra preocupado por su evolución.
La Reina Sofía y su hermano tienen una excelente relación, tanto que Constantino se ha convertido en uno de los pilares más férreos de su vida. En su infancia vivieron juntos el declive de la familia real griega y años después se convirtieron en grandes consejeros del otro en algunos de los momentos más importantes de su reinado. Siempre han hecho lo máximo por estar presentes para el otro, por lo que se han visto obligados a viajar si querían estar juntos. De hecho, los viajes de la Reina Sofía a Grecia han sido tan habituales últimamente que incluso se ha barajado la posibilidad de que fijara allí su lugar de residencia, aunque fuera durante un tiempo, para estar cerca de él.