A sus 70 años, Ernesto de Hannover es una de las figuras reales más polémicas y controvertidas de la realiza europea cosechando a sus espaldas una gran colección de escándalos. Desde su ruptura sentimental con la princesa Carolina de Mónaco hace más de quince años, el aristócrata no ha dejado de ser el protagonista de titulares negativos que ha ido recogiendo la prensa a lo largo de los años sin dejar de ser el jefe de la depuesta Casa Real de Hannover, que gobernó en el reino homónimo hasta 1866. Entre sus varapalos sentimentales, sus problemas judiciales y con el alcohol, y los encontronazos con su familia, ¿qué ha sido de Ernesto de Hannover durante estos últimos años?
Ernesto de Hannover es primo hermano de la reina emérita Sofía y hay quien considera incluso que debería ser el auténtico rey de Inglaterra. Algo que podría haber ocurrido si en lugar de Victoria de Inglaterra, hubiera ascendido al trono su tío Ernest August, hijo del rey Jorge II y tatarabuelo de Ernesto. Sin embargo, su gran salto a la fama como una figura real relevante fue en su boda con la princesa Carolina y su entrada por la puerta grande en la familia real de Mónaco. Antes de este enlace, Ernesto había contraído matrimonio en 1981 con Chantal Hochuli, una rica heredera de un multimillonario arquitecto suizo con la que tuvo a sus dos hijos, Christian y Ernesto Jr. de Hannover, pero esa relación no llegó a buen puerto.
En una ceremonia secreta celebrada en el Salón de los Espejos del Palacio de Grimaldi de Mónaco, Ernesto y la princesa Carolina decidieron darse el "sí, quiero", aunque el mundo y la prensa no se enteró hasta el día siguiente. La hija de Rainiero II de Mónaco y Grace Kelly también había contraído matrimonio anteriormente en dos ocasiones: en 1978, con Philippe Junot en una boda por todo lo alto, y en 1983 con Stéfano Casiragui, padre de sus dos primeros hijos que falleció a los siete años en un accidente acuático. A los seis meses de la boda de Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover, llegó a sus vidas su primera hija en común, Alexandra, ya que la princesa se subió al altar embarazada de tres meses. En 2008 y después de diez años de matrimonio, la pareja de monarcas decidió poner punto y final a su relación sentimental.
Fiestas, excesos y escándalo público
Desde su ruptura con la princesa de Mónaco, la lista de escándalos el príncipe alemán de la Casa Real de Hannover no hizo más que crecer. La afición del monarca por la fiesta y los excesos ha sido el principal motivo de su caída a los infiernos ya que ha sido capturado en varias ocasiones en un serio estado embriaguez, despeinado y cometiendo actos propios de un escándalo publico. En la Exposición Universal de Hannover de 2000, fue fotografiado orinando en el pabellón turco, lo que provocó una gran protesta oficial del Gobierno de este país. Más tarde, en 2000, agredió al propietario de un hotel cercano a la residencia donde pasaba el verano en la isla de Lamu, en Kenia. Por lo visto, al royal le molestaba la música alta que salía de la discoteca y decidió agredir al dueño con un objeto metálico, según informó el medio 'Der Spiegel'. Además, el monarca ha sido denunciado por el matrimonio que se encargaba del cuidado de su casa de Grunau, en Austria.
Aunque de todos sus escándalos, uno de los más significativos ha sido por el que casi pisa las cárcel austríaca. En 2021, Ernesto fuecondenado a diez meses de cárcel, con posterior suspensión de la pena, por herir en estado de embriaguez a un agente de policía y amenazar a otro con un bate de béisbol. El tribunal también le obligó al de Hannover a buscar otra residencia en Austria y a asistir a psicoterapia.
Una familia dividida
Además de sus problemas con la justicia y con su propia personalidad, de Hannover no se habla con su hijo mayor, Ernesto Jr. Su hijo está casado con la modelo y empresaria rusa Ekaterina Malysheva con la que tiene un hijo en común, y el monarca no acudió a su boda celebrada en 2017. La disputa entre los dos nace en Ernesto de Hannover que reclama a su hijo los castillos de Marienburg y Calenberg, dos propiedades que le pertenecen al heredero por descendencia. En 2022, la justicia le dio la razón a Ernesto Jr. al desestimar la demanda por la que le reclamaba a su hijo unos cinco millones de euros por el valor de dichas propiedades emblemáticas.
Su delicado estado financiero y de salud
Numerosas empresas arruinadas, aventuras profesionales frustradas, demandas legales perdidas, viajes, fiestas, excesos y vivir por encima de las posibilidades es lo que ha llevado a Ernesto de Hannover a estar casi en la banca rota. Medios alemanes aseguran que se encuentraal borde de la ruina y que el royal no es capaz de hacer frente a sus deudas, gastos y lujos. Aunque su fortuna estaba cifrada en varios cientos de millones de euros, nada queda de aquella tasación. De hecho, la revista alemana 'Bunte' se atrevió a asegurar que tuvo que pedirle un préstamo de 40.000 euros a su primera mujer, Chantal Hochuli, para hacer frente a su liquidez.
Y los excesos traen consigo graves problemas de salud conforme el paso del tiempo. Entre los diferentes problemas físicos que ha padecido durante estos últimos años se encuentra una pancreatitisaguda que le llevó al coma en 2005, una infecciónabdominal por la que tuvo que ser ingresado de urgencias en Ibiza en 2011, fue operado de urgencia del corazón en 2016 y dos años después, fue ingresado en una clínica de Austria debido a varias hemorragias internas y a una grave inflamación del páncreas.
Su vida sentimental después de Carolina de Mónaco
El monarca ha estado con varias mujeres desde que puso fin a su relación con Carolina de Mónaco, aunque todavía no se hayan divorciado oficialmente para mantener sus títulos y la herencia de sus descendientes. Entre ellas, Ernesto de Hannover fue visto con la glamurosa condesa de Portugal, María Magdalena Bensaude, pero poco les duró el amor. Desde 2021, el aristócrata alemán mantiene una relación con la artista española Claudia Stilianopoulos, estable y consolidada en Madrid, aunque la prensa los ha visto discutir acaloradamente en la calle. Ella por su parte tiene dos hijos de su anterior pareja con la que estuvo 17 años.
Ernesto de Hannover parece que empieza una nueva etapa de su vida junto a su pareja Claudia Stilianopoulos. Sin embargo y hasta el mes de febrero, Ernesto ha sido capturado por los medios de comunicación en un fuerte estado de nerviosismo y enfado, muy común en su personalidad.