No hay duda de que la vida del Príncipe Guillermo ha dado un giro radical de 180 grados en los últimos meses. Pese a que el monarca gozaba de una muy buena situación tanto profesional como personal, al estar situado en la primera línea de la Corona británica y tener a sus seres queridos cerca, la salud ha azotado a dos de sus pilares fundamentales. Algo por lo que al heredero al trono no le ha quedado más remedio que poner la vista en un futuro que nunca hubiera esperado.
Tal y como ha revelado en The New York Times Tina Brown, periodista especializada en la Familia Real británica, “la noticia casi simultánea del cáncer del Rey Carlos y el de Kate, ha puesto a Guillermo y su esposa ante una proximidad aterradora para ascender al trono justo en el momento para el que habían esperado durante años, en el que poder criar a sus hijos lejos del ojo público”. Con estas palabras, la profesional ha dejado entrever que la idea de que el Príncipe Guillermo pueda convertirse en el Rey de Reino Unido en poco tiempo, es algo que ha provocado un estrés irremediable en la pareja: “Según he podido saber, la perspectiva de que esto sea así les está causando una enorme ansiedad”, ha revelado.
Los Príncipes de Gales, presionados por "la carga de la Corona"
La inquietud que gira en torno al futuro de la Familia Real británica es algo que mantiene en vilo tanto al heredero al trono como a su esposa en un momento verdaderamente complicado. Según la periodista en cuestión, los Príncipes de Gales consideran que se encuentran “bajo una presión inmanejable” en pleno tratamiento por el cáncer que padece Kate Middleton. Y es que, en unas circunstancias en las que la Princesa debería centrarse plenamente en su bienestar, y su marido estar junto a ella, los factores externos sobre lo que pasará en un futuro les están atormentando.
A esto se suman los múltiples escándalos en los que se han visto envueltos algunos miembros del clan Windsor y que no han hecho en absoluto sencilla la situación. Entre ellos está la lejanía del Príncipe Harry y Meghan Markle o los vínculos del Príncipe Andrés con Jeffrey Epstein. Dos puntos a tener en cuenta en los que Guillermo y Kate van teniendo un papel mucho más notorio. Esto se debe a que “Kate es el miembro más popular de la Familia Real solo por detrás de Guillermo”, lo que hace que “si el futuro de la monarquía pende de un hilo, ese hilo es ella”.
Los ciudadanos británicos han posado todas sus esperanzas en los Príncipes de Gales, que consideran que cuentan con “un maremoto de responsabilidad prematuras” que se está acercando “peligrosamente” en la dirección de ambos: “Petrificados, sin tiempo de preparación y con Kate gravemente enferma, el Príncipe y la Princesa de Gales esperan la carga de la Corona, que ahora será terrible”, ha sentenciado la experta.
Uno de los grandes deseos de la pareja era el de criar a sus hijos lejos de la presión mediática que tienen los Reyes de un país. El Príncipe Guillermo y Kate Middleton preferían mantener un segundo plano en este aspecto, pero las circunstancias podrían hacer que se vieran obligados a adelantar sus planes. Por ello, tendrían que enseñar algunas cuestiones vitales a sus pequeños de manera mucho más pública que como hubieran imaginado, algo que temen. Pero lo cierto es que, por ahora, su prioridad es la de centrarse en la evolución en el estado de salud de la Princesa y en que, tan pronto como pueda, retome sus quehaceres habituales.
El Príncipe Guillermo reaparece en pleno tratamiento de Kate Middleton contra el cáncer
Sea como fuere, de momento el Príncipe Guillermo prefiere centrarse en el presente, o al menos eso demuestra. Aunque permanece centrado en el estado de salud de Kate Middleton, el heredero al trono ha reaparecido en redes sociales con total normalidad. Lo ha hecho para alentar a las jugadoras de la Selección de Fútbol Femenino de Inglaterra en un momento clave. Un movimiento que han agradecido las deportistas y los seguidores del matrimonio, sobre todo teniendo en cuenta que no se trata de una situación sencilla para el heredero al trono.
Aún así, ha sacado fuerza para demostrar que permanece atento a todo lo que sucede dentro del Reino Unido, aunque sus actividades oficiales hayan disminuido considerablemente. Mientras tanto, la Reina Camilla se encarga de la gran parte de actos oficiales que en un primer momento pertenecían a su marido. El monarca, pese a estar inmerso en su tratamiento contra el cáncer, también continúa trabajando e incluso tiene previsto viajar a Australia.