Las polémicas protagonizados por el hijo de Mette-Marit van a suponer un antes y un después para la Familia Real de Noruega. A lo largo de estos meses, la institución se ha visto en el punto de mira a raíz de sus diversas posturas a la hora de afrontar las tres detenciones, así como todas las acusaciones de Marius Borg. Ahora, la prensa del país publica las graves consecuencias que ha traído consigo este escándalo.
El pueblo noruego no va a olvidar fácilmente este turbulento año para la Familia Real. Según apunta 'Dagbladet', a través de una encuesta de opinión que encargó a la empresa InFact, la opinión de los noruegos sobre la Casa Real y la monarquía ha cambiado de forma drástica. Y no precisamente para bien.
Tal y como recoge el estudio, los encuestados han cambiado su manera de ver al Príncipe Haakon y a Mette-Marit, así como al resto de la Familia Real de Noruega. El estudio sentencia que la confianza de la gente en la Casa Real es más negativa y ha cambiado de un año para otro. De las 1042 personas encuestadas, a las que se le ha preguntado si su visión de la Familia Real y de la Monarquía ha cambiado durante el último año, el 45,1% responde a que les ven ahora de forma más negativa.
"La sucesión de polémicas ha ensombrecido el trabajo que realizan. Sería extraño que no hubiera afectado a las personas. Con tanto ruido como ha habido, pensé que el número sería mayor. Muchos también están contentos con la Familia Real y sienten lástima por la situación en la que se encuentra. Estoy deseando ver si esta opinión negativa continuará en el tiempo o cambiará", valora Caroline Vagle, experta en realeza de 'Se og Hør'.
No son los primeros datos que alertan a la Familia Real de las graves consecuencias que está teniendo para ellos el escándalos de Marius Borg. Hace unas semanas, la cadena pública del país, NRK, publicaba otro estudio, este realizado por Norstat, en donde mostraba que los encuestados habían confirmado que su visión sobre la monarquía había cambiado considerablemente.
El 45% de las personas preguntadas reconoció que tenía una visión más negativa del Rey Harald y del resto de miembros. "La mayoría lo justifica con la situación relacionada con Marius Borg. Otros con Marta Luisa y el chamán Durek Verrett", apuntan desde el ente público. Por otro lado, también señalan que el apoyo a la monarquía se mantiene estable. "El 64% de la población dice ahora que apoya la monarquía", se puede leer.
La reflexión del Rey Harald en medio de los escándalos de Marius Borg
El pasado mes de octubre, el Rey Harald hizo una contundente reflexión sobre todo lo que habían vivido durante la apertura del Storting. "El Palacio Real es un equipo que trabaja bien en conjunto. Somos una familia. Con las alegría y desafíos que todos sabemos que esto conlleva. Tanto en los tiempos buenos como en los difíciles, tratamos de permanecer unidos y apoyarnos mutuamente. Agrademos toda la calidez y consideración que se nos ha mostrado a lo largo de este año tan especial y exigente", llegó a asegurar.
Lo cierto es que la Familia Real de Noruega ha vivido su año más convulso. Y no solo por los escándalos del primogénito de Mette-Marit. La corona noruega ha tenido que hacer frente a la hospitalización del Rey Harald durante unas vacaciones en Malasia en el mes de febrero. Tuvo que ser operado para que le pusieran un marcapasos y después regresó al trabajo.
Después, vivieron la escandalosa boda de Marta Luisa y Durek Verrett, quienes decidieron prohibir el acceso de la prensa del país para darle la exclusiva al documental que estaban rodando para una conocida plataforma de streaming. Tras el enlace, los medios de noruego sacaron a la luz las presuntas agresiones sexuales del chamán de las estrellas.
La preocupación de Haakon por la imagen de la monarquía en Noruega
Con la primera detención de su hijastro, el Príncipe Haakon dejaba muy claro que tenía plena confianza en las autoridades. Una postura que ha seguido manteniendo hasta el tercer arresto. Durante todo este tiempo, el hijo del Rey Harald también manifestaba su preocupación por la visión que tenían los ciudadanos noruegos sobre la monarquía.
"Todas estas cuestiones tienen un impacto en la forma de pensar de la gente. De la misma manera, el debate sobre la monarquía es algo que seguimos, pero creo que es mejor que otros comenten", explicó en su momento. Ahora la prensa noruega apunta a que la salvación de la corona estaría en Ingrid de Noruega, a quien están intentando proteger del escándalo de su hermano mayor. Según las publicaciones del país, será ella quien reconduzca la imagen que se tiene actualmente de la institución.