Kate Middleton tiene estilo propio, pero en los últimos tiempos nos recuerda cada vez más a nuestra Reina Letizia. A las pruebas nos remitimos. Al menos tienen coincidencias curiosas de estilo. Así lo hemos podido comprobar hoy mismo con la aparición de la Princesa de Gales en un picnic protagonizado por niños en los jardines de Chelsea (Londres), durante su afamado Festival de las Flores. Esta es una cita que nunca se pierden los miembros de la Familia Real, grandes amantes de la naturaleza y la horticultura.

Kate Middleton, picnic de rosa y con alpargatas españolas al estilo de Letizia
Gtres.

En este caso, Kate no se ha perdido la inauguración y ha recurrido al dulce rosa para disfrutar del entorno natural y de la espontaneidad infantil. Su vestido camisero de largo midi podría haberlo llevado la soberana española sin ninguna duda. De manga larga abullonada y con jaretas, el diseño lo firma ME+EM y cuesta alrededor de 520 euros. Kate Middleton ya lo lució el año pasado y como curiosidad tenemos que añadir que incluso su madre, Carole Middleton, se lo ha puesto en otra ocasión.Sus pendientes dorados representaban, muy a gusto con el fondo de este evento, una hoja vegetal. Por último, la princesa británica remataba su look con unas alpargatas de cuña Made in Spain de la marca Castañer (140 euros). Este calzado es una de las señas de identidad de Letizia cuando se trata de su indumentaria de verano.

El resultado era de primavera en estado puro. Recordemos que el rosa se ha convertido también en uno de los nuevos colores favoritos de la Reina Letizia, cuyo vestidor no para de recibir novedades en este tono. Favorecedor, juvenil, refrescante... Todo son puntos a favor.

Kate Middleton, picnic de rosa y con alpargatas españolas al estilo de Letizia
Gtres.

La esposa del príncipe Guillermo, de 41 años, se lo ha pasado en grande en esta jornada al aire libre. Después de ser una de las invitadas más espectaculares en los recientes fastos por la Coronación del rey Carlos III, su suegro, Kate Middleton ha retomado su agenda con toda normalidad. Se le da igual de bien tocarse con tiara que ir a melena suelta y con alpargatas, sentándose sobre un mantel de cuadros en el suelo y degustando sabrosas frutas en un picnic.