Hace solo unos días, el pasado 19 de noviembre, se celebraba el Día Nacional de Mónaco. La festividad estuvo presidida por los príncipes Alberto y Charlène, y junto a ellos la princesa Carolina. Además también estuvieron presentes muchos otros miembros de los Grimaldi, la generación más joven encabezada por los hijos de las princesas. Eso sí, se echó en falta a una persona importante: la princesa Estefanía. No se supo el motivo de su ausencia, pero inevitablemente fue motivo de comentarios.
El hecho es que ahora hemos vuelto a verla. Y ha sido para poner voz a una de sus causas más queridas, en el Día Mundial del Sida, que se conmemora el 1 de diciembre. En tanto que ella es presidenta de la Asociación Monegasca de la Lucha contra el Sida desde 1988, realizó una rara intervención ofreciendo una entrevista a la cadena Monaco.info.
La hija menor de Rainiero y Grace de Mónaco, de 55 años, aparece en la imagen algo desmejorada. O por lo menos, no arreglada. Fiel a su estilo 'natural', Estefanía lleva una sencilla coleta y nada de maquillaje. Aunque a principios de año parecía haberse sometido a algunos retoquitos estéticos (como se puede ver en la foto inferior), en esta ocasión no se notan. Vestida con una chaqueta gris, sin más, la princesa no se preocupa en exceso de su apariencia física ni de ir a la última moda, haciendo gala, una vez más, de que ella va por libre.
En un año particularmente complicado a causa de la pandemia, la princesa ha querido llamar la atención sobre una enfermedad que sigue muy presente entre nosotros, pero que incluso antes de la Covid-19 "no tenía la atención que merece. El sida hace estragos y contagia cada año a un gran número de personas. Nuestros afiliados ya están aislados y lo están aún más por el temor a ser contagiados. Están en riesgo. Es una segunda espada de Damocles para ellos".
Durante la entrevista con la presentadora, Estefanía hace hincapié en la necesidad de recaudar fondos para la investigación, ya que los donativos y otras acciones también han debido paralizarse por la pandemia. Aún así dice que cuentan "con la generosidad de muchas personas que quieren ayudarnos". La princesa no duda en hacer un llamamiento y recuerda algunas de las actividades que lanzan desde la asociación para continuar en la lucha. También asegura que tanto los enfermos de sida como el resto de personas deben "protegerse" contra el virus de la misma manera.
Por último, la princesa Estefanía se despide con un mensaje positivo, aunque no exento de crítica: "Me siento muy orgullosa de Mónaco y hace mucho más que otras grandes naciones por el VIH. Durante años fue un tema tabú, no ha sido fácil, abrir los corazones, abrir los ojos, abrir las almas... ¡y también abrir las carteras! Pero ahora estoy muy orgullosa de la movilización, y ¡bravo Mónaco! Hay que continuar así".