Abdalá II, el rey de Jordania, ha sido operado de urgencia a sus 60 años en Alemania, tal y como han informado desde la Casa Real hachemita. Al parecer, la intervención ha sido un éxito, aunque se ha generado cierto ambiente de preocupación al conocer que el mandatario jordano tuvo que viajar el pasado domingo 10 de abril hasta Frankfurt para ser operado de un disco intervertebral en la columna. Este revés de salud le ha provocado fuertes dolores en los últimos años y poco a poco se ha ido convirtiendo en una dolencia insoportable, hasta que ahora ha llegado a requerirse como “urgente” su paso por un quirófano por parte de los médicos que han seguido su caso.

“Durante su servicio en las fuerzas especiales del Ejército, el rey solía sufrir de intermitentes dolores de columna, que se han agudizado recientemente debido a la presión sobre el nervio, lo que dio lugar a que los médicos aconsejaran al monarca a someterse urgentemente a una intervención quirúrgica”, rezaba el comunicado oficial que anunciaba el paso por quirófano del rey Abdalá II de Jordania, que ha preferido emplazar su operación en Alemania, donde hay un centro especializado en su dolencia en la columna vertebral, pese a que en su país haya profesionales capaces de hacerse cargo de su caso.

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Foto: Gtres

En Frankfurt, la ciudad alemana en la que Abdalá II de Jordania ha sido operado, también es el lugar en el que ha emplazado el posoperatorio y la recuperación. Según fuentes de la Casa Real hachemita, el mandatario permanecerá al menos una semana en suelo alemán mientras se recupera de la intervención, para después poner rumbo de nuevo a Jordania y así descansar en palacio, rodeado de sus seres queridos y personas de confianza.Durante su convalecencia, es el príncipe Al Hussein, heredero al trono, quien se ha hecho cargo de las funciones institucionales de su padre. Un papel que, pese a tener 27 años, el hijo mayor de Rania de Jordania afronta sin mayores complicaciones, pues ha sido formado desde que era un niño para el papel que en un futuro le tocará desempeñar, a no ser que den sus frutos los intentos de golpe de Estado que se han diseñado en los pasillos de palacio.

Rania de Jordania con sus hijos
Foto: Gtres

Un intento de echar a Abdalá II del trono jordano fue sofocado con éxito, pero ha tenido fatales consecuencias para los autores, que ya están cumpliendo condena en prisión, a excepción de su hermanastro, el anterior heredero al trono, Hamzah bin Husein, hijo de la princesa Noor de Jordania, que conmutó su pena con un perdón público pactado para tratar de demostrar que había fracasado y así evitar nuevos intentos. Eso sí, ha renunciado su derecho a usar el título de príncipe al considerar que va en contra de sus principios personales y que “no son coherentes con el método, las directrices y el estilo moderno” que han adoptado las instituciones de Jordania, bajo la batuta de su hermanastro, el rey Abdalá II.