Felipe de Edimburgo, marido de lareina Isabel de Inglaterra, se encuentra ingresado en el hospital Edward VII de Londres desde el pasado martes 16 de febrero. Según comunicó Buckingham al día siguiente, "el ingreso del duque es una medida de precaución, siguiendo el consejo del médico personal de Su Alteza, después de sentirse mal. Se espera que el duque permanezca en el hospital durante unos días para estar en observación y que pueda descansar".Pues bien, los días pasan y ya va camino de una semana hospitalizado, lo cual ha hecho saltar las alarmas. Desde palacio no han informado de la dolencia exacta que padece el duque, aunque sí han descartado que esté relacionada con el coronavirus. El duque de Edimburgo cumplirá 100 años el próximo 10 de junio, por lo que la preocupación es lógica.
Además se da la circunstancia de que, justo en estos momentos, el príncipe Harry y Meghan Markle han dado a conocer su decisión final de NO regresar a la primera línea de la Familia Real británica. Un mazazo, sin lugar a dudas, para la veterana monarca, de 94 años. Se desconoce si su esposo se ha enterado de la noticia, pues ya se encontraba en el hospital cuando se anunció.
El pasado viernes, Buckingham actualizaba el parte médico de Felipe de Edimburgo, asegurando que estaba "de buen humor". Al día siguiente, su hijo mayor, el Carlos de Inglaterra, visitaba a su padre en el hospital. Hasta ahora ha sido el único que se ha acercado a verle debido a las restricciones sanitarias por la pandemia, ya que no se permiten visitas de parientes salvo "en situaciones excepcionales". El príncipe heredero ya está vacunado contra el coronavirus.El heredero británico se desplazó desde su residencia campestre en Highgrove, donde vive con Camilla de Cornualles, lo que motivó que se especulase sobre un posible empeoramiento del duque. Estuvo en la habitación alrededor de una media hora y luego salió del centro con gesto relajado bajo la mascarilla. Subió a su coche y puso rumbo de vuelta a su casa, lo cual tranquilizó un poco sobre la situación.
Pero la respuesta quizás más clara sobre el estado de salud del duque sea la de su nieto, el príncipe Guillermo, quien hoy mismo acudía al centro de vacunación montado en el King's Lynn Corn Exchange de Norfolk. Era obligado preguntarle por su abuelo y el joven, acompañando sus palabras con un guiño, decía: "Está bien; le están vigilando". Guillermo se encuentra en estos momentos residiendo en su casa de campo de Amner Hall, en Norkfolk, con su esposa y sus tres hijos.El duque de Edimburgo fue trasladado al hospital de Londres desde el Castillo de Windsor, donde se encuentra aislado con la reina Isabel. Por cierto, ambos ya han recibido su vacuna contra la Covid-19. Llegó en un vehículo, no en ambulancia, y entró por su propio pie. En Windsor hizo precisamente su última aparición pública, el 22 de julio de 2020, perfectamente erguido y tan elegante como siempre.