El Príncipe Carlos es el hijo mayor de la Reina Isabel II y, por tanto, el heredero al trono de Inglaterra. Con 71 años recién cumplidos y sin indicios que hagan pensar que su cambio de papel institucional esté cerca, el padre de Harry y William está disfrutando ahora de una etapa calmada y feliz que se ve reflejada en la imagen que el pueblo inglés tiene ahora de él.
Su historia de amor con Camilla Parker Bowles ha condicionado, desde su noviazgo con Diana de Gales, su imagen, ya que el matrimonio con la madre de sus hijos siempre estuvo marcado por la presencia de su primer amor, el que nunca dejó de sentir por quien es hoy -y desde el año 2005- su mujer.Carlos de Inglaterra se estrena en las redes sociales
La muerte de Lady Di, en 1997, fue, sin duda alguna, el trago más amargo que la familia real británica ha vivido en los últimos tiempos y la razón por la que la propia Reina Isabel y su hijo mayor vieron empañada su imagen de manera tan grave que tuvieron que tomar medidas. Los dos hijos de la 'princesa del pueblo' quedaron huérfanos y mientras los ingleses lloraban desconsolados y se sumaban a la pena de los dos adolescentes, desde Buckingham Palace se tardó tanto en reaccionar que todavía hay quien no perdona la frialdad con la que se trató la tragedia más polémica que se recuerda.
Hacía apenas un año que Diana y Carlos habían firmado su divorcio y la madre de Harry y William ya había confesado en una entrevista televisada que en su matrimonio eran tres y que Camilla siempre había estado presente. Un punto menos para Carlos de Inglaterra. Conforme sus hijos fueron haciéndose adultos Carlos pasó a un segundo plano. Oficializó su relación con Camilla, con quien se casó en 2005 y una vez que su mujer fue aceptada por Harry y Guillermo la imagen pública del príncipe heredero fue mejorando hasta llegar al día de hoy. Hace solo unos días que el abuelo de Archie, Charlotte, Louis y George ha celebrado sus 71 años durante un viaje oficial en el que le acompaña la mujer de su vida.