Federico de Dinamarca tras salir de casa de Genoveva Casanova caminó desorientado. En torno a las 8 y media de la mañana el heredero al trono danés paseó completamente solo. Con la única compañía de su maleta, la cual arrastró durante unos minutos, se mostró preocupado. "Se le ve perdido", se aseguró. Es unos instantes después cuando el hijo de la reina Margarita se sienta en una marquesina de autobús, hace una llamada y donde poco después es recogido. Solo unos segundos antes sacó un papel de su bolsillo, un ticket, que posteriormente rompió un tiró a una papelera cercana al parque de El Retiro en Madrid. Una misteriosa prueba de la que se quiso deshacer y que ahora genera muchas preguntas.
Es tras hablar por teléfono cuando Federico de Dinamarca saca un papel, lo lee detenidamente y lo tira. Aunque solo él sabe cuál era su contenido, estos días han sido muchas las opciones que se han planteado y es que ¿qué pudo haber comprado el príncipe que no quería que nadie se enterara? Mientras él continúa en silencio y se limita a seguir con su agenda, Federico Jiménez Losantos ha puesto sobre la mesa las opciones que rondan por su cabeza. "Él rompe un papel que lógicamente es un ticket porque si es algo personal lo tiras en la basura del piso de Genoveva. Al ver el papel, mira qué ha podido comprar, no es un restaurante, no es un museo… Yo veo dos compras posibles: o una joya o algo de farmacia (...) Es algo que no quieres que se sepa", dice el presentador en su espacio radiofónico 'Crónica Rosa'.
Federico de Dinamarca y su viaje a España sigue copando titulares dentro y fuera de España
Lo que sí está confirmada es su escapada a España, en la que él y Genoveva pasearon por el retiro y cenaron en un reservado de un restaurante muy especial en la capital. Un viaje en el que aprovecharon para ir al museo Thyssen y cuya entrada podría estar, quién sabe, si en su bolsillo. Esta es la hipótesis planteada por Isabel González, subdirectora del espacio: "Con que le pillen un ticket de la entrada del museo Thyssen-Bornemisza ya tendría que dar explicaciones a su mujer. Simplemente el viaje a espaldas de su familia ya es una prueba".
Aunque este no es el único detalle que resulta llamativo en el vídeo de Federico de Dinamarca. El heredero no tuvo ningún miembro de seguridad a su lado durante unos minutos, una actitud un tanto inconsciente teniendo en cuenta que podría haber estado en peligro. No pareció haber informado a nadie de su paradero, ya que de haberlo sabido le hubieran recogido en el domicilio de Genoveva, donde pasó la noche. "Él puede no querer que se sepa lo que está haciendo pero la embajada y la Casa Real tienen la obligación de saber dónde está. Es el heredero. Es la seguridad de un reino. Si Leonor se echa un novio en Zaragoza y se va a pasar la noche en el barrio de Torrero, de la puerta no se mueve la seguridad", dice el periodista.