Kate Middleton está recluida en Anmer Hall, su casa de campo. Una mansión ubicada en un terreno de más de 20.000 hectáreas, en Norfolk, de la que de vez en cuando sale para hacer vida como cualquier mortal. Así lo demuestra su visita a una tienda de alimentación esta semana, donde se mostró afable y cercana con sus propietarios. Eso no quita la lucha interna a la que hace frente desde que el pasado mes de enero se retirara de la vida pública.
A la princesa de Gales le está siendo muy difícil el tratamiento pionero para vencer al cáncer, pero quiere ser optimista. También sincera con sus amigos más íntimos, siendo uno de ellos quien ha roto su silencio en la prensa británica. "Está enfocada en su recuperación. Está aceptando la terapia y se encuentra mejor. Ha habido una etapa muy complicada y preocupante. Todo el mundo está a su lado", contaba alguien cercano a ella en 'Vanity Fair'.
Días después de que este testimonio viera la luz, una biógrafa de la Casa Real Británica aporta nuevos datos sobre ella. Eso sí, estos son muchos menos esperanzadores. Lady Colin Campbell, autora del libro 'Meghan and Harry: The Real Story: Persecutors or Victims' y también biógrafa de Lady Di, tiene acceso a su entorno y, por tanto, información muy valiosa.
"Los británicos son muy conscientes de las circunstancias tan adversas que le está tocando vivir al príncipe William. Está haciendo lo que podría hacer cualquier persona en su lugar. Kate está enferma, el tratamiento es agotador. Debe recuperarse para poder ocuparse de sus tres hijos, que son muy pequeños. Está demasiado enferma ahora para volver al trabajo", explica en una conversación con 'Mujerhoy'.
La royal está recibiendo en estos momentos un tratamiento de quimioterapia preventiva. Tolera la medicación, una excelente noticia para los médicos, aunque eso no precipitará su vuelta. Todo lo contrario. De hecho, será cuando esté al 100% y cuando lo decidan los médicos cuando dé ese paso hacia adelante.
![Kate Middleton y su casa de campo](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 800 450"%3E%3C/svg%3E)
Kate Middleton y su casa de campo.
Gtres
Una larga ausencia, ya de cinco meses, en la que está acompañada de su marido, el príncipe Guillermo. Él y sus hijos son sus grandes motores, sin duda, la mejor medicina. Por ello, ha decidido coger las maletas e instalarse durante unos días en su refugio, el cual está situado al este de Inglaterra.
Sin pausa pero sin prisa, Kate Middleton quiere volver a sus quehaceres. No hay fecha prevista, pero sí una confirmación de última hora. No será en el Tropping The Colour, el desfile británico más esperado para este verano. A pesar de que en un principio el Ministerio de Defensa anunció que ella pasaría revista a las tropas, el Palacio de Buckingham ha anunciado lo contrario. En su lugar estará el general James Bucknall, lo que una vez más deja a Kate Middleton fuera de juego hasta nueva orden.
Esto, sin ningún género de dudas, resta presión a Kate. Del mismo modo a su marido, que continúa de 'vacaciones' obligadas hasta que se resuelvan los comicios en Reino Unido. Eso no quita que tenga previstos algunos actos en su agenda, por ejemplo, la conmemoración de los 80 años del Desembarco de Normandía, donde se espera su presencia.
Tras meses de silencio y sin apenas transparencia en lo referente a la salud de Kate, su nombre sigue siendo uno de los más buscados en la Red y uno de los que más curiosidad despierta en sus redes sociales. Ha aumentado considerablemente el número de seguidores en su perfil de Instagram, donde, por cierto, publicó la polémica y retocada foto junto a sus hijos.
Tal ha sido el desconcierto y la falta de información sobre ella que comenzaron a circular varias teorías sobre ella. Desde la posibilidad de que una doble se estuviera haciendo pasar por ella a que estuviera entubada.
Quizás sea en su reaparición ante los medios de comunicación cuando dé explicaciones sobre cómo se encuentra y cuando, por fin, se descubra cómo está. Sin secretos ni palabras y cuestiones maquilladas.
Fue el pasado mes de marzo cuando, quizás obligada por los rumores, dio un paso al frente y contó en un vídeo cuál era su verdadero estado de salud. Un escueto, pero intenso mensaje en el que pidió paciencia e intimidad para superar este bache de salud.
El último mensaje que la Princesa de Gales ante las cámaras
"Estoy bien y cada día me siento más fuerte. Han sido unos meses muy duros. Sin embargo, las pruebas realizadas después de la operación descubrieron que había cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico me recomendó que me sometiera a un tratamiento de quimioterapia preventiva y ahora me encuentro en las primeras etapas de ese tratamiento. Para todos aquellos que enfrentan esta enfermedad, en cualquier forma, por favor no pierdan la fe ni la esperanza. No están solos", comentó.