La hija menor de Carolina de Mónaco está viviendo su primer gran amor, y no lo oculta. Además de que ya ha presentado a su novio a toda la familia, sus salidas son cada vez más frecuentes. La pareja acudió a varios de los partidos del reciente Master de tenis de Montecarlo, donde no pararon de dedicarse gestos cariñosos. ¡Hasta un beso hubo!

Alexandra tiene 18 años y lleva más de un año saliendo con Ben-Sylvester Strautman, un joven de su edad, jugador de baloncesto y nacido en una familia adinerada. Juntos forman una pareja ideal, ilusionada, fresca y juvenil. Pese a su corta edad parecen ir muy en serio y de la mano han asistido a los últimos acontecimientos familiares, como la boda de Christian de Hannover y Sassa de Osma, en Perú. La primavera la sangre altera, y ellos derrochan abrazos, susurros, confidencias y sonrisas sin importarles quién está mirando... ¡Están enamoradísimos!

Relajados

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Alexandra de Hannover y su novio fueron dos de los espectadores habituales durante la semana del Master de tenis de Montecarlo. Sentados en un palco, con actitud informal y relajada, sus miradas arrobadas no podían ocultarse ni bajo las gafas de sol...

Un joven millonario

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Ben-Sylvester Strautman, de 19 años, es un joven alemán procedente de una adinerada familia de la Baja Sajonia, que se mudó a Mónaco antes de que él naciera. El joven es dj y jugador de baloncesto, llegando a militar en el equipo nacional de Mónaco sub 18.

Gestos cariñosos

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Tras más de un año de noviazgo, la pareja está viviendo su momento álgido de amor y complicidad. Él le dedica un tierno beso a su chica en la cabeza...

Una pareja asentada

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La pareja no se perdió la gran final, por supuesto, que ganó nuestro Rafa Nadal. Pese a su juventud, Alexandra y Ben-Sylvester se muestran en público como una pareja muy consolidada y formal. Él ya conoce a toda su familia política, y que asistiera al último Baile de la Rosa es la prueba más palpable de que van muy en serio.

¡El beso!

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Tras más de un año de "espera", los jóvenes se fundieron en un dulce beso en los labios. Era la primera vez que les veíamos demostrándose así su amor.

Amor a primera vista

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La pareja se conoció en noviembre de 2016 en una carrera solidaria, y desde entonces no se han separado. ¡La chispa fue instantánea!

Princesa enamorada

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De carácter dulce y discreto, Alexandra está viviendo este primer gran amor tranquila, pero intensamente. Este besito en el hombro de su novio fue solo uno más de esos momentos "íntimos" que nos brindaron mientras disfrutaban del tenis.

¿La próxima boda?

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Al ritmo que van, a nadie le sorprendería que la suya fuera la próxima boda en el Principado. Su juventud ahora mismo lo hace improbable, pero no olvidemos que la madre de Alexandra, Carolina de Mónaco, se casó con su misma edad con Philipe Junot, 17 años mayor que ella.