El verano está a la vuelta de la esquina y no podemos pensar en otra cosa: largos días al sol y noches eternas bajo la luna. Pero... ¡ay, el pelo! Todo el año recibiendo mimos y cuando llega el buen tiempo aparecen todas las amenazas capilares.
Lo cierto es que quienes tienen el pelo rizado ya están acostumbradas a librar cierta batalla contra el encrespamiento en cuanto la humedad se dispara. Y es que el cabello rizado, en mayor o medida, es poroso y se ve muy afectado por los cambios de temperatura. Pero tranquila, porque aunque te cueste creer, se puede pasar la estación veraniega con unos rizos perfectos. ¡Apunta estos tips!
6 consejos clave para mantener unos rizos perfectos este verano
1- Olvídate de los cepillos
Usa siempre peine de púas anchas y redondeadas, ya que protegen el cabello de roturas y combaten la humedad.
2- Antes de salir de la ducha...
Presiona las puntas de tu pelo como pellizcándolas, moviendo toda la masa de cabello hasta la zona de las raíces. A continuación, envuélvelo en una toalla de microfibra o en la tela de una camiseta de algodón, pero sin frotar.
3- Siempre usa el secador con difusor
A potencia baja y temperatura alta es como mejor se forma el rizo. Además, haciéndolo de esta manera conseguirás que aguante mucho más frente a la humedad.
4- En la cama...
Apuesta por una almohada con funda de seda. Y no te vayas a dormir nunca con el pelo húmedo (ni siquiera cuando haga mucho calor).
5- Al despertar...
Si no tienes intención de lavarte el pelo, refresca tus rizos con un producto activador o con un poco de acondicionador ligero sin aclarado. Esto contribuirá a mantener la humedad a raya por más tiempo.
6- Recuerda no tocarte el pelo demasiado
Una vez que has conseguido que tus rizos estén perfectos y definidos es aconsejable no volver a peinar ni cepillar tu pelo, para no romper la estructura del mismo.
¿Un truco?
Aparte de la humedad, el sol, el agua salada y el cloro pueden dejar tus rizos sin elasticidad, propensos a romperse. Para proteger la fibra de estos daños, haz esto: Antes de meterte al mar o la piscina pasa por la ducha de agua dulce. Si tu fibra se satura de agua, no absorberá la del mar o la clorada. Al salir, pasa de nuevo por la ducha para retirar cualquier resto de sal o cloro de la fibra capilar.
Pero además de estos consejos, recuerda que hay que tener algo muy en cuenta: la belleza de los rizos comienza en la ducha, y cualquier forma de encrespamiento se la resta. Por lo tanto, tienes una misión a cumplir: lavar y acondicionar tu pelo con los productos adecuados para mantener el nivel óptimo de humedad, es decir, ni rizos resecos ni hinchados.