Lady Di fue una mujer muy admirada y respetada. La que fuera esposa del ahora rey Carlos III tenía una dulzura y un carisma muy especial que hacía que, allí donde ella fuera, se la adorase. Su elegancia, discreción y saber estar fueron su seña de identidad, siendo uno de los miembros de la familia real británica más queridos hasta el terrible accidente de tráfico que trunco su vida, sus sueños y sus esperanzas de futuro.
Todo en Lady Di es icónico, sus estilismos, sus joyas, su peinado, su maquillaje natural y, por supuesto, sus perfumes, algo quizás menos conocido pero igualmente de interés entre sus seguidores más acérrimos. Estos 5 perfumes florales marcaron toda su trayectoria.
Quelques Fleurs de Houbiqant
Este fue el perfume que eligió la princesa Diana para llevar en su boda con el entonces príncipe Carlos de Inglaterra. Una fragancia que combinaba a la perfección con el ramo que llevaba y que fue creado por ella con muchísima ilusión, sin intuir todo el sufrimiento y dolor que habría de pasar a lo largo de su matrimonio y tras la ruptura con la familia real.
Fue un perfume que Diana reservaba para ocasiones en especiales y que, como los aromas van ligados indefectiblemente a los recuerdos, hubo un momento de su vida en que, tras su fallido matrimonio, dejó de utilizarlo.
Fue un perfume que se lanzó en el año 1913 y que tiene unas notas verdes de salida. Flor de azahar, estragón, begamota y limón abren esta suntuosa fragancia floral que tiene un corazón de lila, jazmín, nardo y lirio de los valles. Sus notas de fondo son acordes de musgo de roble, miel. Sándalo, vainilla y haba tonka.
First de Van Cleef & Arpels
En el libro autobiográfico del príncipe Harry, “En la sombra”, el hijo pequeño de Lady Di destapa los entresijos de la familia real y cuenta algunas anécdotas y detalles acerca de su madre, como un perfume que le trae muchos recuerdos de su infancia y que tuvo que oler en una sesión con su terapeuta para hacerlos aflorar.
En la época en la que el duque de Sussex y su hermano William era pequeños, la princesa de Gales utilizaba a diario la fragancia First de Van Cleef & Arpels. Era el primer perfume que lanzaba el reputado joyero que se convirtió, sin duda, en una de sus más preciadas joyas.
El perfume se lanzó en 1976 y su inspiración era la mujer, una mujer única, especial y elegante. Diana Spencer reunía todas las cualidades que inspiraban esta fragancia y fue un perfume que le acompañó mucho tiempo. Tapa dorada y un diseño muy elegante, el frasco se inspiraba en un diamante tallado, un guiño a las joyas de la firma.
El perfume tiene una salida dulce y muy femenina con notas de mecolotón, bergamota, mandarina y frambuesa que dejan paso a un corazón de narciso, jacinto, lirio de los valles y jazmín con un fondo de sándalo, vainilla, miel, haba tonka y ámbar. Una fragancia lujosa y elegante que Lady Di hizo suya y que encajaba perfectamente con su personalidad.
Bluebell Eau de Toilette de Penhaligon’s
Esta firma de perfumes está muy ligada a las personalidades ingleses. De hecho el propio Winston Churchill utilizaba una de sus aguas de colonia a diario.
La princesa Diana era amante de Bluebell, una fragancia que femenina floral con notas verdes que emula un paseo por el bosque con la frescura de la mañana en la atmósfera.
¿Por qué enamoró este aroma a la princesa de Gales? Porque es muy fresca y ligera. Tiene una apertura cítrica y verde muy explosiva, un corazón de jacinto (nota que a la princesa le fascinaba) y un fondo especiado de clavo. Una delicia de aroma.
24 Faubourg Eau de parfum de Hermès
Otra maravillosa fragancia floral con toques cítricos, un denominador común en los perfumes que elegía la princesa de Gales para su tocador. Fue creado por Maurice Roucel en 1996, poco antes del fallecimiento de Diana, pero aseguran que fue amor al primer olfato. La firma dice de él que es un perfume que su aroma evoca el Mediterráneo y los días soleados.
Muchas de sus notas las tienen los otros perfumes favoritos de la princesa y es que ella siempre fue fiel a la misma familia olfativa. Sus notas de salida son la naranja, el jacinto, la bergamota y el melocotón. Su corazón tiene acordes de iris, flor de azahar y jazmín; y sus notas de fondo son pachulí, sándalo y vainilla. Fabulosa.
Diorissimo de Christian Dior
Uno de los perfumes clásicos que Diana Spencer adoraba era el mítico Diorissimo de Christian Dior. Este perfume fue creado por Edmond Roudnitska en 1956 y es una fragancia icónica, sofisticada y envolvente.
Sus notas de salida verdes y cítricas, muy frescas. Las hojas verdes y la bergamota de apertura se adentran en un corazón floral compuesto por lirio de los valles, lila, jazmín o ylang-ylang que se recuestan en un fondo de sándalo. Un perfume que ha pasado a la historia y que la princesa de Gales tenía entre sus preferidos.
La figura de Lady Di sigue fascinando a día de hoy y se ha convertido en una auténtica leyenda. Estos fueron algunos de los perfumes que utilizó en momentos clave de su vida y, aunque diferentes, siempre apostaba por las fragancias florales con toques cítricos, como era ella. Elegante y dulce pero a la vez espontánea y vital.
Estos aromas, aunque quizás no es algo tan conocido de la princesa, son elementos que siguen permitiendo que su legado siga vivo y que devuelven un poquito de su esencia a sus admiradores. Una mujer que se hizo eterna.