Extensiones, espráis texturizadores, mascarillas fortificantes, acondicionadores densos, aceites reparadores… Algunas de nosotras hemos probado mil y un productos para intentar conseguir dar volumen a nuestra pobre y finísima melena. Muchas veces (quizás demasiadas), sin el resultado deseado. Y es que, si tienes el pelo fino, sabrás de primera mano que no es nada fácil que el cabello no parezca que está alicaído y que al peinarlo quede sin vida alguna; que parezca frágil y poco cuidado cuando la realidad es que hemos probado todos los métodos existentes para intentar sacarle el máximo partido.
Lo cierto es que el pelo fino es, quizás, el tipo de cabello más complicado de todos. Por su delgado grosor, es difícil de peinar, moldear o de conseguir unas ondas o unos rizos que verdaderamente se mantengan en el tiempo. Este tipo de pelo suele, además, enredarse con facilidad y, cuando se le aplica calor a través de planchas, tenacillas o incluso a través del secador, suele caer sin cuerpo alguno y con una forma sin ninguna gracias. Pero no te preocupes, no estás sola. Son muchas las mujeres que viven esta realidad y, por tanto, son también muchos los productos de peluquería que están ideados única y exclusivamente para este tipo de problemas.
Los productos de peluquería que necesitas si tienes el pelo fino
Si lo que quieres, como nosotras, es conseguir una melena con más volumen y grosor, debes, obviamente, hacerte con un champú específico para este tipo de soluciones pero también con un acondicionador, una mascarilla y quizás también un spray fijador diseñados para lograr que nuestro pelo tenga más cuerpo. Es por ello por lo que hemos seleccionado ocho productos que utilizan los peluqueros más profesionales pero que tú también podrás tener en el baño de tu casa para por fin tener una melena radiante, llena de vida y con un movimiento envidiable.
Eso sí, te recomendamos que, además de usar estos champús, acondicionadores y mascarillas, sigas unas indicaciones básicas para cuidar tu pelo de la mejor forma. La primera, y quizás la más importante, es que te alejes lo máximo posible del secador y las planchas. El calor suele estropear nuestro cabello y, si puedes evitarlo, mejor que mejor. Lo mismo ocurre con la exposición solar. Evita que el sol te de directamente sobre la cabeza e intenta protegerlo con sprays ideados exclusivamente para proteger tu pelo del sol. Por último, te recomendamos que, siempre, siempre, siempre, cepilles tu cabello antes de la ducha (nunca después). Con estos consejos y estos productos, seguro que notas la diferencia. Palabra de SEMANA.