Marta López Álamo se sometió a una intervención de aumento de pecho el verano pasado. Pero ha sido ahora, casi un año después de la operación, cuando ha querido responder a varias preguntas al respecto. "Chicos, hace casi un año me operé del pecho y el resultado no puede estar gustándome más. Os voy a responder a cualquier dudad y os quiero contar mi experiencia porque ha sido muy positiva", ha empezado diciendo la novia de Kiko Matamoros sobre todo el proceso de recuperación. Y es que, según explican los expertos, el postoperatorio dura de 6 a 12 meses.
La influencer ha contado que es la cuarta vez que se cambia los implantes. "Recuerdo haber llevado muy bien todo el proceso postoperatorio siempre" y cuenta que, pese a no ser la primera vez que pasa por una quirófano "durante la recuperación no me dolían nada", ha manifestado.
Marta López Álamo habla muy sincera sobre su cuarta operación de pecho
Sobre si está feliz con el resultado, relata que "no puedo estar más contenta", ha dicho al tiempo que enseña una fotografía presumiendo de escote. Cuenta, también que, aunque ahora está encantada con su imagen, ha tenido que cambiar sus prótesis hasta en cuatro ocasiones. La primera vez se operó para aumentar el tamaño de sus senos y optó por unas prótesis anatómicas que iban colocadas por debajo del músculo. El resultado lejos de gustarle, le desagradó y decidió volver a intentarlo en una segunda operación.“Tuve una mala experiencia por mi complexión y por el tema deporte. La cuestión es que el escote se me hacía rarísimo cuando me puse pecho por primera vez por detrás del músculo, por eso decidí volver a operarme".
En la segunda intervención, tres años después, se puso las prótesis por delante del músculo, pero aquí, según cuenta ella misma, erró al ponerse más cantidad que la vez anterior: “cuando me operé la segunda vez tenía 22 años y se me veía muy desproporcionada y tenía dos bolas que no me gustaban”.
El tercer intento fue para quitarse pecho y tampoco terminó de convencerle el resultado final. "Cuando me puse tanto pecho, el bolsillo lateral se cerró y me provocó 'sinmastia' (que se me juntaba el escote y me insultaban por ello, por eso me tuve que volver a meter en quirófano para separarme el pecho. Además esta vez tampoco se me curó bien la cicatriz".
El último, y de momento el definitivo, fue el pasado verano. "Adelgacé por inercia al crecer y ya no me veía bien con tanto pecho estando delgada, así que ahora me he puesto un tamaño más pequeño y estoy encantada", ha explicado adjuntado una foto de cómo era su pecho de jovencita, sin prótesis.
Otro de los temas sobre esta operación que despertaba curiosidad entre sus seguidoras es la cicatriz. "La verdad es que no se me notan prácticamente nada. Igualmente me haré láser cuando pase algo más de un año", ha dicho.
Si estás pensando en hacerte un aumento de pecho...
La mamoplastia de aumento es una operación quirúrgica destinada a aumentar el tamaño de las mamas, por una serie de motivos. Dada la posibilidad de un desarrollo mamario tardío, se aconseja no realizar la intervención antes de los 18 años. Puede realizarse
con implantes o con grasa propia, depende del resultado que se desee y de las características de la propia persona. En el caso de María, ha recurrido a los
implantes de tamaño medio —315cc— para evitar que el resultado quede muy exagerado.
El aumento de la mama, que se consigue implantando una prótesis, ya sea detrás del tejido submamario (subglandurales) o debajo de los músculos torácicos (submsuclar). Las incisiones se hacen de forma que las cicatrices resulten lo más invisibles posible, habitualmente debajo de la mama, alrededor de la parte inferior de la areola, o en la axila. El método de implantación, el volumen, y la posición de la prótesis dependerá de las características anatómicas de la persona (estatura, peso, tamaño del tórax...) y será determinada por el cirujano.