Hace unos días, mientras la gran mayoría de los españoles sufríamos la ola de frío que azota la península desde después de navidades, Makoke se paseaba por las playas de Tenerife en biquini luciendo tipazo, ¡y culazo! La colaboradora de Telecinco no viajaba sola, lo hacía acompañada por una desarmante energía positiva que combinaba a la perfección con los aires de seguridad en sí misma que desprende en las redes sociales. Ella siempre se ha considerado sexy. Y es que, sin duda, la clave para serlo, es sentirse así y la exmujer de Kiko Matamoros tiene ese concepto muy claro.
A sus 51 años, tiene un puesto vitalicio en las listas de las mujeres más deseadas de nuestro país. Nosotras damos fe de ello, hoy, después de ver el increíble posado que ha dejado publicado en su cuenta de Instagram, para sus 367 mil seguidores, y a través del cual hemos observado cómo evoluciona el aumento de glúteos al que se sometió el pasado mes de agosto. Además de darnos cuenta de que la soltería le está sentando divinamente, también apreciamos que su trasero sigue en perfecta forma.
Makoke enseña la evolución de su aumento de glúteos cinco meses después
Se ha convertido en uno de los rostros de la televisión que más comentarios positivos recibe en lo que a físico se refiere, algo que se ha ganado a pulso. Sí, en tercera persona del singular, porque Makoke esculpe su cuerpo en el gimnasio diariamente desde siempre. Es cierto que, de vez en cuando, se pone en manos de su clínica de confianza y se hace algunos “retoquitos” para potenciar su belleza, pero la colaboradora se calza las zapatillas todos los días para hacer su sesión de deporte correspondiente.
Sin embargo, aunque trabaja a conciencia la musculación en el gimnasio con sentadillas y entrenamiento específicos para el tren inferior, la televisiva no conseguía aumentar el tamaño de sus glúteos de forma natural. Por eso, como ayuda extra, acudió el pasado verano a la Clínica Diego de León para elevar su pompis.
"Por muchas sentadillas que haga, el glúteo no crece», comentaba Makoke. Pero “tampoco quería bajo ningún concepto llevar implantes ni una transformación radical o agresiva que implicase una cirugía”. Para suplir esa carencia, optó por la opción más rápida y menos invasiva y dolorosa: las infiltraciones de ácido hialurónico.
¿Cómo se realiza? La clínica Diego de León nos lo explica
La clínica de referencia de Makoke explica en cuatro sencillos pasos en qué consiste el procedimiento que además de rápido, -no dura más de media hora-, no requiere reposo ni cuidados especiales. El primer paso, y con el objetivo de mitigar cualquier tipo de molestia, se realiza un pinchacito en cada glúteo para aplicar anestesia local.
A continuación, llega el momento de proceder a las infiltraciones de ácido hialurónico con cánula, en lugar de aguja. Este punto es muy importante porque el hecho de utilizar cánula significa que solo se realiza a través de un pinchacito en cada glúteo. Esta técnica de infiltración agiliza el procedimiento, reduce el riesgo de posibles hematomas y también garantiza el menor número de pinchacitos -solo uno a cada lado-. Por último, se realiza un masaje para distribuir bien el ácido hialurónico de forma homogénea y uniforme.
Y…¡Resultado inmediato! Aunque el resultado es visiblemente espectacular desde que finaliza el tratamiento, el efecto definitivo mejorará progresivamente todavía más con el paso de los días. El precio varia en función de los viales utilizados. 160 euros cuesta cada uno y normalmente se recomienda la infiltración de 10 viales. Por lo tanto, por 1600 euros podemos moldear nuestros glúteos de forma inmediata.