Desde hace unos meses, cuando dejaron de ser obligatorias las mascarillas, nos despreocupamos más de nuestra mirada, la que había sido nuestra carta de presentación durante más de un año. Fue el momento de quitarnos la mascarilla obligatoria por el covid y presumir de boca, de labios jugosos, de dientes alineados y de los labiales más de moda de la temporada. Pero, sentimos decirte que no puedes olvidarte de tus ojos. Y menos aún de la zona de su alrededor. ¿Por qué? El contorno de ojos es una de las zonas del rostro que más precisa de nuestros cuidados. Hay que prestarle especial atención, ya que al disponer de menos glándulas sebáceas que el resto de la piel del rostro (aproximadamente es de 5 a 10 veces más finas), necesita de unos cuidados específicos. También debes tener en cuenta que es la que está en más constante movimiento, por lo que no es de extrañar que sea una de las primeras zonas donde se manifiesta tanto el paso de los años como el cansancio.

Así debes aplicar el contorno de ojos

Según los expertos, este cosmético debemos incorporarlo a nuestra rutina de belleza a partir de los 25 años, ya que a partir de esta edad comienza a perderse la presencia de colágeno de manera orgánica. Pero, ¿cómo lo usamos? Hay que prestar especial atención en su modo de uso. Tienes que hacerlo dos veces al día, después de la limpieza facial y evitando siempre el contacto con el ojo. Aplica con los dedos anulares una pequeña cantidad de producto debajo del contorno de ojos, justo encima del hueso. Hay que recordar que se recomiendan el uso de estos dedos para no romper los capilares, ya que son los que menos fuerza muscular tienen. A la hora de aplicarlo, hazlo desde dentro hacia afuera. Sigue la zona del hueso orbital con pequeños toques para evitar la retención de líquidos, estimular la piel y reducir las líneas de expresión. Nunca restriegues la zona, ya que podrías dañarla.