Seguro que llevabas mucho tiempo deseando darte un chapuzón en la piscina o buscar ese bronceado soñado a la orilla del mar. Pero probablemente te hayas dado cuenta de que después de unos días tu melena ya empieza a sufrir los estragos del cloro y la sal. ¿Qué ocurre? La humedad del mar y las piscinas pueden alterar las cutículas del cabello, dejándolo encrespado y reseco y oxidando el color. ¡Pero tranquila! Por suerte existen consejos infalibles para evitar que todo eso ocurra. Ponte manos a la obra ya.

Lava tu pelo de manera adecuada

Si vas a pasar tus vacaciones en la playa, el lavado diario es imprescindible, ya que así eliminas los restos de sal. Sin embargo, esto también conlleva una gran pérdida del color. Para evitarlo, hazte una sola enjabonada y utiliza agua fría. Si está caliente el color se pierde mucho más rápido. Además, es fundamental que elijas un champú sin sulfatos, mejor si incluye entre sus ingredientes aceite de oliva y de argán, ya que aportan un plus de hidratación.

Protege tu melena del sol

Media hora antes de exponerte al sol, tras cada baño, y cada dos o tres horas, aplícate un aceite o spray con SPF. Al igual que proteges tu piel, debes hacer lo mismo con tu melena. Además de proporcionarle protección frente a los rayos solares, también la nutrirá a fondo dejándola mucho más suave y manejable a la hora de peinarla.

Las mascarillas son imprescindibles

En verano los cabellos (en especial los teñidos o con mechas) necesitan mascarilla reparadora 2 o incluso 3 veces por semana. Éstas aportan toda la nutrición e hidratación que el pelo necesita. ¿Otro consejo? Cada 15 días también es importante hacer un baño de aceite vegetal. Opta por aceite de coco o almendras, y aplícalo a lo largo de toda tu melena. Después, recúbrete la cabeza con una toalla caliente para que penetre más rápido. Déjalo actuar una hora y lávalo bien. ¡Notarás la diferencia!

una melena cuidada en verano
Es clave proteger la melena del sol, el cloro y la sal en verano. (@Redes Sociales)

¡Ojo a los tonos verdes!

Algunos líquidos que contienen las piscinas, como el cobre, producen una reacción química por la que los rubios muy claros o con mechas adquieren reflejos verdes. Para minimizar este efecto, mójalo siempre con agua de ducha antes de bañarte, para que el pelo no absorba el agua de la piscina.

Evita las herramientas de calor

El secador y las planchas dañan tu cabello, ya que el calor debilita la queratina y aumenta la formación de radicales libres. Por ello, en la medida de lo posible deja que se seque al aire libre.