Kim Kardashian siempre sorprende con sus estilismos, pero aunque parecía imposible esta vez ha ido un paso más allá. La famosa socialité salió hace unos días a cenar a Nueva York con un atrevido look que no dejaba casi nada a la imaginación. Kim se colocó un sujetador de encaje, eso sí de la firma Gucci, y prefirió prescindir de camisa para mostrar sus pechos en todo su esplendor. Sobre él, solo una blazer negra. Pero la cosa no quedó ahí. Para completar el atrevidísimo estilismo eligió unos leggings azul petróleo satinados. Lo dicho, un conjunto muy explosivo, incluso demasiado para la siempre excesiva Kim.
Sin embargo, para compensar un look tan atrevido eligió un complemento muy clásico. Uno de los bolsos básicos de la firma Prada. En un caso es un modelo tipo maletín vintage de nylon. Además, la hermana más famosa del clan Kardashian optó por el peinado de moda de este verano, su larga melena peinada totalmente lisa y con una marcada raya al medio. Un maquillaje muy sutil completaba su look beauty.
Quizás porque no quiere hacer ostentación, después del tremendo susto que pasó en París cuando unos ladrones entraron en su apartamento, en octubre de 2016, y le robaron joyas por el valor de 11 millones de euros, Kim solo lució una discreta alianza de diamantes.