Poco a poco se va abriendo cada vez más a esa ventana que son las redes sociales, por la que las influencers nos dejan ver su día a día, sus gustos, sus mejores compras o trucos de belleza. Lourdes Montes no es de las más activas, pero al igual que sus más de 151 mil seguidores de Instagram, cada vez estamos más deseosas de conocer sus tips de estilo. Si hace unos días nos revelaba la infusión natural que utilizaba para perder peso o su rutina diaria de limpieza facial, ahora ha sido el tratamiento con el que consigue evitar que las arrugas comiencen a marcarse y mantener las antiestéticas manchas a raya.
La mujer de Francisco Rivera ha acudido a su clínica de confianza en Sevilla para someterse a una sesión de IPL, un tratamiento con el que consigue lucir una piel radiante y con el que consigue unos resultados espectaculares, según ella misma ha confesado: "Es un láser bastante agradable, no molesta, no duele y lo que hace es fomentar la producción de colágeno, eliminar las pequeñas arruguitas, las manchas y aporta muchísima luminosidad. Es una opción estupenda para las que queremos tener la piel bonita sin meternos en el quirófano inyectarnos cualquier tipo de producto. Es un mantenimiento cada tres meses fantástico, muy fácil y sin ningún efecto secundario. Yo lo recomiendo cien por cien".
¿En qué consiste el tratamiento?
Se comienza retirando el maquillaje y todo tipo de pruebas que se puedan llevar y tras colocarse unas gafas de protección ocular, se aplica en la zona un gel frío y se inicia la sesión de IPL, que a través de la emisión de una banda de luz se permite tratar varios objetivos a la vez. La energía de la luz intensa pulsada actúa en las capas más profundas para mejorar gradualmente la tonalidad y textura de la piel, eliminar las manchas, rojeces, venitas, poros dilatados, arrugas finas, dar luminosidad y mejorar globalmente la calidad de la piel al estimular la formación de colágeno.
Los resultados son evidentes desde la primera sesión, aunque las mejoras se van percibiendo de manera progresiva. En primer lugar, desaparecen las manchas y rojeces y así la piel va recuperando un tono mucho más uniforme, y a medida que avanza el tratamiento se va notando una mejoría general en la calidad de la piel.
Los beneficios generales
Estimula la formación de colágeno.
Mejora la tonalidad y textura de la piel.
Elimina las manchas, rojeces, poros dilatados y arrugas finas.
La piel gana en luminosidad, consiguiendo un cutis más radiante.
El poro se vuelve más fino.
Mejora el acné activo moderado y sus secuelas.